El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, adelantó la noche de este martes que en las próximas horas realizará una declaración en cadena nacional de radio y televisión donde expondrá los pormenores del asesinato del joven diputado socialista Robert Serra y de su compa?era, María Herrera, ocurrido el pasado miércoles.
En el marco de las celebraciones por el segundo aniversario de la victoria electoral del fallecido líder Hugo Chávez y en honor al parlamentario, Maduro afirmó que el crimen "formaba parte de un conjunto de golpes y ataques terroristas contra líderes de la Revolución Bolivariana y detrás de esto está la decisión de sectores radicales de la derecha a nivel internacional".
Al respecto detalló que el plan fue neutralizado en gran medida gracias al apoyo del pueblo y de gobiernos amigos que alertaron a las autoridades venezolanas sobre la ejecución de homicidios selectivos contra líderes chavistas.
El mandatario agradeció a todos por la altura moral y la conciencia demostrada, mientras exhortó a la población a mantener el cauce democrático y pacífico de la Revolución Bolivariana frente a las pretensiones desestabilizadoras de la oposición más radical.
Igualmente manifestó que la operación fue organizada por grupos ultraderechistas radicados en el exterior y con el apoyo de aliados en Venezuela, quienes "ante la desesperación y las derrotas de las guarimbas (protestas violentas) y la guerra económica tomaron la decisión de lanzarse a una fase violenta sin precedentes".
El presidente venezolano reiteró el llamado a la oposición a no irse por "los atajos de la violencia" para obtener prebendas políticas y condenó el hecho, tomando en cuenta que las pretensiones al asesinar a Serra son "matar el futuro que nos legó Hugo Chávez".
"Nuestra victoria siempre será la paz, no la venganza, no podemos permitir que nos lleven a una Guerra Civil. La Revolución Bolivariana su gran virtud es que ha sido profunda y radical y que la hemos hecho en paz, sin balas, sin muertos, con plenas libertades", destacó.
Serra y Herrera fueron asesinados el pasado 1 de octubre en su residencia ubicada en la parroquia La Pastora de Caracas y según declaraciones de fuentes gubernamentales el "abominable crimen" obedeció a una "macabra encomienda".