En China se necesita una estrategia nacional para mantener baja la tasa de suicidios |
Pekín,11/09/2014(El Pueblo en Línea)-"Teniendo en cuenta la complejidad del suicidio, para mantener una tendencia cada vez más a la baja se requiere el esfuerzo de toda la sociedad y de los diversos factores del gobierno", expresó Huang Yueqin, director del Centro Nacional para la Salud Mental, durante el Día Mundial de Prevención del Suicidio.
La tasa china de suicidios ha ido disminuyendo en las últimas dos décadas y ahora se sitúa en 8,7 por cada 100.000 personas, según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS). A mediados de los a?os 1990 fue de 23 por cada 100.000, según el informe.
Sin embargo, China carece de estrategias nacionales para la prevención del suicidio, lo que califica la OMS como un problema de salud pública. Veintiocho países ya tienen este tipo de estrategias, destacando el compromiso de los gobiernos nacionales para el establecimiento y aplicación de un plan de prevención coordinada.
Por ejemplo, explica Huang, una prohibición del Ministerio de la Agricultura sobre el libre uso de los plaguicidas altamente tóxicos bajó la tasa de suicidios en las zonas rurales, que es donde se concentran la mayoría de los suicidios.
El problema del mal uso de los plaguicidas "no podía ser abordado por las autoridades de salud de forma independiente", aseveró Huang.
En 2003, la tasa de suicidio entre las mujeres rurales era casi de 17 por cada 100.000, en su mayoría por intoxicación al consumir plaguicidas. La cifra es ahora de 8,5 por cada 100.000.
Li Xianyun, subdirector del Centro de Investigación y Prevención del Suicidio en el Hospital Huilongguan de Beijing, atribuyó el descenso a la mejora de los programas médicos, el desarrollo económico, y un efectivo apoyo social para las mujeres en las zonas rurales, además de las restricciones de acceso a los mortales plaguicidas y fertilizantes.
Debido a la brecha socioeconómica entre el campo y la ciudad, los residentes rurales han tenido una tasa de suicidios mucho mayor que los residentes urbanos, confirma Huang.
Sin embargo, los recursos como las líneas de ayuda y los programas de salud mental a nivel de la comunidad, siguen siendo escasos en las zonas rurales, opina Li.
Además, en el nuevo marco del Programa Médico Cooperativo Rural, una política de salud del gobierno que cubre el 99 por ciento de los residentes rurales, los gastos médicos por intento de suicidio no son reembolsables, acotó.
La autoridad de salud en los últimos a?os han invertido mucho en el tratamiento de enfermedades mentales graves, estableciedo un sistema de registro de pacientes en todo el país y ofreciendo tratamiento altamente subsidiado. Pero "los esfuerzos coordinados dirigidos específicamente a la prevención del suicidio deben ser mejorados", enfatiza Li.
Los estudios han encontrado que el 63 por ciento de la gente que se suicidó tenía una enfermedad mental. En su mayoría padecían de depresión profunda.
Sin embargo, sólo el 10 por ciento de los enfermos de depresión en China han sido diagnosticados y tratados adecuadamente, según estadísticas oficiales.
"Tenemos que mirar de cerca los factores de riesgo que incluyen los trastornos mentales, las malas condiciones de vida, la pérdida de seres queridos, el desempleo, la falta de apoyo social y la inmigración", advirtió Li.
Huang considera que tal esfuerzo podría comenzar con detalles como la construcción de comunidades amables para ancianos y la instalación de ventanas "anti suicidios" en los edificios de gran altura.
A nivel mundial, cada a?o alrededor de 800.000 personas se quitan la vida. El 75 por ciento de los suicidios ocurren en los países de bajos y medianos ingresos, según el informe de la OMS.