DAMASCO, 15 abr (Xinhua) -- Por lo menos 70 personas murieron y 128 resultaron heridas hoy en una explosión ocurrida contra un punto de reunión de autobuses que transportan a chiitas evacuados de dos pueblos progobiernistas en el norte de Siria, se?aló a Xinhua una fuente bien informada.
La explosión, provocada por un atacante suicida que conducía una camioneta cargada de explosivos, sacudió el área de Rashideen en poder de rebeldes en la parte rural de la provincia de Alepo, donde los autobuses que transportan a 5.000 chiitas simpatizantes del gobierno esperaban la reactivación de un acuerdo dise?ado para garantizar su transporte hacia el área de Alepo controlada por el gobierno.
El acuerdo, recientemente alcanzado entre los rebeldes y el gobierno de Siria bajo la supervisión de Irán, Turquía y Qatar, fue preparado para garantizar la evacuación de la gente de los pueblos chiitas de Kafraya y Foa simpatizantes del gobierno en la provincia de Idlib hacia áreas bajo dominio del gobierno en la provincia de Alepo.
A cambio, el gobierno permitirá a los rebeldes y a sus familias dejar los pueblos rebeldes de Madaya y Zabadani en el norte de Damasco para dirigirse a la provincia de Idlib.
La evacuación inició el viernes, con la salida de 5.000 chiitas de Kafaraya y Foa, y 2.300 rebeldes y sus familias que dejaron el pueblo de Madaya en los primeros grupos.
Los chiitas llegaron al pueblo rebelde de Rashideen, mientras los rebeldes llegaron al cruce controlado por el gobierno de Ramouseh en Alepo.
Estaba previsto que ambos convoyes saldrían hacia sus respectivos destinos, antes de que los rebeldes en Rashideen retuvieran el convoy del pueblo chiita, a?adiendo nuevas demandas al acuerdo original.
El convoy rebelde también se detuvo en Ramouseh, en medio de reportes de que había comunicaciones para continuar el cumplimiento del acuerdo.
Una fuente se?aló a Xinhua que la nueva demanda de los rebeldes era que la evacuación de los combatientes chiitas de Kafraya y Foa, fuera antes que la de los civiles.
Sin embargo la demanda fue rechazada ante el temor de que si los combatientes chiitas, que defienden los pueblos, dejaban primero los pueblos, los rebeldes podrían atacar y cometer masacres ahí.
Ahora, prevalece un estado de extrema consternación entre los evacuados de Kafraya y Foa.
Un testigo de los que esperan en Rashideen comentó a Xinhua que tres personas con problemas de salud murieron mientras esperaban, antes de la explosión.
A?adió que tres mujeres parieron dentro de los autobuses en medio de una difícil situación humanitaria debido a que esas personas han estado esperando ahí por 24 horas sin suficientes alimentos ni agua.