Alimentos como la yuca, un tubérculo fundamental en el Caribe, y el tomate, alcanzan niveles de pérdidas de 20 a 34 por ciento en la región caribe?a, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
La pérdida de la yuca en Guyana es de 23 por ciento, mientras que en Trinidad y Tobago es de 20 por ciento, de igual forma el 20 por ciento del tomate se desaprovecha en Santa Lucía, 27 por ciento en Trinidad y Tobago y 34 por ciento en Guyana, informó hoy la oficina para América Latina y el Caribe de la FAO, con sede en Santiago de Chile.
"Ningún esfuerzo por erradicar el hambre y la pobreza en el Caribe será viable sin políticas públicas que promuevan modalidades de consumo y producción más sostenibles", explicó el organismo.
Según la FAO, el Instituto Nacional de Investigación y Extensión Agrícola de Guyana estima que alrededor del 30 por ciento de todas las frutas y verduras que se producen en ese país no se consumen.
Una cifra similar se observa con las hortalizas en Haití, donde el 35 por ciento se pierden o desperdician.
Las pérdidas y desperdicios de alimentos en América Latina alcanzan 223 kilogramos de alimentos por persona al a?o, cantidad más que suficiente para satisfacer las necesidades calóricas de toda su población en situación de hambre.
"No hay en el Caribe una estimación de las pérdidas totales del Caribe debido a infraestructura deficiente, prácticas inadecuadas en la postcosecha de los alimentos y a serias limitaciones en la organización de las cadenas de valor", se?aló Vyjayanthi López, de la Oficina Subregional de la FAO para el Caribe.
Agregó que "los países caribe?os están realizando múltiples esfuerzos para reducir sus pérdidas y desperdicios de alimentos", al destacar que la isla de Granada ha avanzado en un sistema de pronóstico y planificación de cultivos.
En cuanto a la infraestructura de procesamiento y empaque, Granada y Guyana han implementado de cadenas de frío y proveen equipo adecuado para el procesado y almacenamiento de frutas y hortalizas, para evitar las pérdidas post-cosecha.
Por su parte, Jamaica como Trinidad y Tobago realizan acciones similares, complementándolas con capacitación a productores, empacadores de alimentos y comercializadores en las cadenas de papa y yuca.
En cuanto al mercado y consumo, Granada promueve el agregado de valor a los productos locales frescos, mediante la elaboración de pulpas y empaques de productos combinados, permitiendo extender la vida de los alimentos y facilitar su preparación para los consumidores.
Por su parte, la Red de Agricultores del Caribe, que agrupa a 14 países impulsa la compra local de alimentos y la diversificación de mercados para cada producto.
Las políticas alimentarias, la reducción de las pérdidas y desperdicios de alimentos se ha incorporado como un elemento clave en las estrategias para la superación del hambre y la pobreza en los países del Caribe.
"Los agricultores necesitan la aplicación de ciencia y tecnología para prevenir y reducir las pérdidas y desperdicios alimentarios", subrayó el ministro de Agricultura de Granada, Alvin da Breo, durante el II Diálogo sobre Reducción de Pérdidas y Desperdicios de Alimentos que concluyó el pasado viernes en Saint George, capital de Granada.
En el encuentro, Argentina, Brasil, Costa Rica, Cuba, Colombia y República Dominicana compartieron con los países del Caribe sus experiencias en la articulación de los sectores público y privado y en la institucionalización de acciones nacionales para la prevención de las pérdidas y desperdicios de alimentos.
La FAO provee la capacitación en el uso de su metodología de caracterización y medición de pérdidas de alimentos y, hasta ahora, ha entrenado a 500 funcionarios de ministerios de Agricultura y productores de 14 países caribe?os.