Por Wang Keju
Beijing, 23/10/2018 (El Pueblo en Línea) - Hosam Elmaghrabi, de 39 a?os, trabaja como periodista y editor de idioma árabe para China.org.cn, portal digital de noticias. él llegó a Beijing en mayo del 2005.
Mi esposa es china. Después de casarnos, vivimos durante tres a?os en el Cairo. Sin embargo, yo no quería que mi esposa se alejara de su familia. En Egipto, mis hermanos se ocupan de mis padres.”
He amado a China desde el primer día que llegué. Es un país enorme, con climas y paisajes muy diversos, y una historia que abarca 5.000 a?os. Aquí la gente es amistosa y acogedora. Además, si tienes que comprar, viajar o resolver situaciones de la vida diaria es fácil y conveniente. Tanto es así, que a veces me preocupa no ser capaz de adaptarme a vivir en otro país”.
Decidí solicitar la residencia permanente porque mis parientes más cercanos, esposa e hija, viven en este país. Mi ni?a, que ya cumplió 13 a?os, nació en China.
El a?o pasado visité Yiwu, provincia de Zhejiang, para realizar una serie de entrevistas. Esa ciudad es uno de los lugares más amistosos que he conocido. Además, muchos de las artículos de uso diario que se utilizan en mi país natal se fabrican allí.
Cuando deambulaba por la gran ciudad del comercio internacional de Yiwu, me encontré con un montón de "ciudadanos del mundo”. También percibí el impacto del pasado y cómo el reciente crecimiento económico está allanando el camino para que la nueva China se revitalice.
En Yiwu conversé con un empresario egipcio llamado Ammar Ashour, que ha vivido en China durante ocho a?os. Me confesó que el gobierno municipal de Yiwu ha alentado mucho su negocio de exportación y le concede gran importancia a su labor.
En Yiwu, Ashour se ha dado cuenta de que sí puede cumplir su sue?o de convertirse en un exitoso empresario.
He encontrado la paz mental y un sentido de pertenencia en esta tierra llena de oportunidades. Es mi hogar y quiero echar raíces. El a?o pasado solicité la residencia permanente y la recibí hace cuatro meses. Yo también me he dado cuenta de que mi sue?o está en Beijing, asegura Elmaghrabi.
Hosam Elmaghrabi habló con Wang Keju.