BEIJING, 25 jul (Xinhua) -- Ante las crecientes incertidumbres del ambiente económico global, los responsables de la elaboración de políticas en China han anunciado una serie de medidas en favor del crecimiento, desde préstamos selectivos a exenciones fiscales, para mantener en la segunda mitad del a?o la actual tendencia económica estable.
Durante una reunión celebrada el lunes por el Consejo de Estado (gabinete), se dio realce a medidas fiscales y monetarias coordinadas.
El país seguirá aplicando políticas macro estables y adoptará una combinación de medidas fiscales y financieras para impulsar la demanda interna y reforzar el apoyo a la economía real, según se dijo en una conferencia presidida por el primer ministro, Li Keqiang.
China, además, buscará una política fiscal más proactiva, y la política monetaria prudente no será ni demasiado estricta ni demasiado laxa.
Esta postura política se conoce después de la publicación de los indicadores económicos del país para el primer semestre. El crecimiento del PIB se mantuvo en gran parte sólido en un 6,8 por ciento, mientras las ventas minoristas y la inversión en la industria inmobiliaria se mantuvieron estables.
Sin embargo, se detectó un ligero debilitamiento en la producción industrial y la inversión en junio, el último mes del período examinado. Además, están creciendo las preocupaciones en el sentido de que las crecientes tensiones comerciales entre China y Estados Unidos empezarán a afectar la economía en unos meses.
Xie Yaxuan, analista de la firma de valores China Merchants Securities, subrayó la importancia de la sinergia fiscal y monetaria para reforzar más eficazmente la economía real. "Dada la actual campa?a de desapalancamiento, el espacio para la expansión crediticia es limitado, lo cual significa que el dinero debe ser usado donde más se necesita. Al mismo tiempo, las medidas fiscales también están sujetas a muchas condiciones restrictivas", agregó.
Con la sinergia política, las medidas fiscales serán más vigorosas en cuanto a las reducciones de impuestos, en tanto que las inversiones y las medidas monetarias garantizarán una liquidez razonable y suficiente, lo cual, a su vez, desempe?ará un papel más importante en el desarrollo macroeconómico, afirmó el economista Zhang Lianqi, quien también es asesor político del país.
En la reunión se acordó una reducción de impuestos por 65.000 millones de yuanes (10.000 millones de dólares) con el fin de alentar a las empresas a invertir más en I+D, aparte del objetivo inicial de recortar impuestos y otros gastos por 1,1 billones de yuanes este a?o.
Se permitirá a los gobiernos locales emitir 1,35 billones de yuanes en bonos especiales con anticipación, lo cual ayudará a lograr un progreso más tangible en los proyectos de infraestructura que carecen de capital.
También se garantizará la entrega del fondo de garantía de financiamiento estatal con préstamos por 140.000 millones de yuanes para unas 150.000 empresas peque?as y microempresas cada a?o.
El mismo día de la reunión, el Banco Popular de China, el central, inyectó 502.000 millones de yuanes en el mercado a través del mecanismo de préstamos a mediano plazo (MLF, siglas en inglés).
Algunos analistas consideraron dicha inyección de capital como una se?al de relajación monetaria integral, pero esto fue refutado por las autoridades.
El Gobierno evitará con firmeza recurrir a una cascada de políticas de estímulo, según se anunció en la reunión del lunes. Los responsables de la elaboración de políticas son plenamente conscientes de los amargos resultados que dejó la decisión de inundar la economía con grandes volúmenes de inversión tomada hace una década: el crecimiento a corto plazo tomó fuerza, pero lo mismo ocurrió con los riesgos económicos potenciales.
Las regulaciones del Gobierno serán específicas y destinadas a asegurar que el desempe?o de la economía esté dentro de un rango razonable, se decidió en la reunión.
"China ha hecho bien al descartar los estímulos masivos", comentó la compa?ía japonesa de valores Nomura, en un informe de investigación.
Absolutamente consciente de las burbujas de activos, China está en plena campa?a de desapalancamiento, en el marco de la cual los deudores, incluidos los gobiernos locales y las empresas, están actuando rápidamente para reducir sus cuentas pendientes a niveles más seguros.
El crecimiento de la tasa del apalancamiento macro de China disminuyó en 10,9 puntos porcentuales en 2017 con respecto a la velocidad media entre 2012 y 2016, según los datos del emisor.
Nomura cree que la nueva postura política es positiva para el mercado de capitales en el corto plazo, y que los maltrechos mercados de bonos de alto rendimiento del país pueden beneficiarse con el estímulo.
Las acciones chinas, después de más de un mes de exhibir un rendimiento mediocre, se recuperaron esta semana, con una subida de 2.900 puntos del índice Compuesto de Shanghai luego de tres días seguidos de buen desempe?o. Por su parte, el índidce Compuesto de Shenzhen cerró en 9.465,8 puntos, materializando una subida del 1,63 por ciento.