Defender la ética en la ense?anza universitaria |
Pekín,14/10/2014(El Pueblo en Línea)-Una serie de sucesivos escándalos, relacionados con los profesores universitarios en China, no sólo ha puesto de relieve la falta de ética que impera en el sector, también ha evidenciado la falta de rigor en las inspecciones de las autoridades educativas del país.
Recientemente, el Instituto de Bellas Artes de Sichuan prohibió ejercer al profesor Wang Xiaojian, después de que circularan fotos besando a la fuerza y acosando sexualmente a dos alumnas en un restaurante .
La medida laboral impuesta a Wang se concreta apenas un día después que el Ministerio de Educación emitiera una directriz sobre la ética a seguir por los profesores universitarios, herramienta de control que persigue eleval el nivel ético y moral en los educadores.
La guía, que prohíbe a los profesores universitarios conductas de acoso sexual o involucrarse en relaciones impropias con los estudiantes, tiene por objeto disponer de mecanismos para ejemplarizar en caso de violación de las normas, atacando las conductas negativas después de que la educación superior china sufriera una serie de escándalos y creciera la preocupación pública sobre el buen manejo de este sector.
El documento también detalla siete prohibiciones que tienen que observar los profesores universitarios, entre las que se incluyen abstenerse de tolerar y/o colaborar en situaciones de fraude y plagio.
Un personal docente corrupto y propenso a las bajas pasiones, ejercerá una nefasta influencia en los estudiantes universitarios. Los maestros deben esforzarse por nutrir e impulsar a los estudiantes a alcanzar su potencial y mejorar el carácter. Los estudiantes que ingresan en la universidad, merecen una educación libre de corrupción y malas influencias.
La conducta inmoral no sólo denigra los logros de una sociedad tradicionalmente respetuosa con los maestros, también conduce al estudiantado por mal camino.
La disminución de los estándares éticos refleja las lagunas del sistema educativo chino, que se caracteriza por una escasez de inspecciones efectivas y la falta de aplicación de penas severas. Esto permite que sean los funcionarios locales los que decidan las medidas disciplinarias . Muchos de ellos dejan correr la corrupción y la mala conducta de los profesores.
El gobierno debe garantizar la aplicación de la ley. China no carece de regulaciones. Es el relajamiento y la falta de aplicación sistemática de las directrices, lo que ha provocado estos vergonzosos incidentes.
El caso de Wang también evidenció la falta de confianza de los estudiantes sobre los mecanismos para proteger sus legítimos derechos ante cualquier intento de corrupción o acoso. Hay que ense?ar a los estudiantes de que manera pueden hacer valer sus derechos ante conductas impropias, vengan de donde vengan.
Urge limpiar la escoria que intenta corromper y acosar a los estudiantes universitario chinos. Tenemos que estar orgullosos de tener un profesorado sano, responsable y ético y no un sector plagado de vergonzosos escándalos.