CARACAS, 22 Jun (Xinhua) -- Tras más de una década de exitoso relacionamiento, los gobiernos de China y Venezuela trabajan en una nueva dimensión de su asociación estratégica integral, apostando a ser un "ejemplo internacional de cooperación", indicó este miércoles el vicepresidente venezolano de Planificación y Conocimiento, Ricardo Menéndez.
Durante una entrevista con medios de prensa de China, Menéndez expresó que ambos Estados han trascendido la visión del simple intercambio comercial y ahora presentan el desafío de "entrelazar sus esquemas de desarrollo", jugando Beijing un papel vital en la anhelada diversificación económica de Venezuela ante la caída de los precios petroleros.
"Venezuela apuesta a un futuro y en ese futuro está China permanentemente, ese futuro está caracterizado por la Agenda Económica Bolivariana que es la hoja de ruta que hemos trazado para enfrentar esta coyuntura (económica) y para cambiar el modelo productivo de nuestro país", manifestó el vicepresidente.
Sumados a los más de 445 convenios de cooperación bilateral vigentes desde hace más de 10 a?os, ambas naciones vislumbran nuevas áreas de interés estratégicas para el desarrollo conjunto y sobre los tradicionales principios de complementariedad y beneficio mutuo.
Dentro de éstas figuran la participación del gigante asiático en el desarrollo de la minería local específicamente en el Arco Minero del Orinoco (AMO), los nuevos proyectos de infraestructura asociados a la Faja Petrolífera del Orinoco "Hugo Chávez" (FPO) y la "localización de capacidades excedentarias" de China en territorio venezolano.
"Recientemente hemos incorporado nuevas áreas de interés como es el área de la minería, específicamente el caso del oro, hierro y acero, queremos incorporar también el tema del coltán, asimismo el aluminio donde la cooperación China-Venezuela ha permitido repotenciar las capacidades industriales", se?aló el titular.
Respecto a la estrategia de China de ubicar capacidades productivas en otras latitudes, Menéndez aseguró que han "aceptado ese esquema" y que en el marco de la Comisión de Alto Nivel China-Venezuela se trabaja "para ubicar esas capacidades en territorio venezolano".
Resaltan como ámbitos de interés la producción de cemento, ya en desarrollo con la instalación y funcionamiento de dos plantas ubicadas en los estados de Aragua (centro-norte) y Trujillo (occidente andino), así como el sector metalmecánica, vidrio, aluminio, materiales de construcción y maquinarias.
Las nuevas tareas en el ámbito de la relación China-Venezuela también vislumbran el desarrollo de la infraestructura, todo lo cual guarda una estrecha relación con la incorporación de las empresas estatales y privadas chinas en los proyectos de la Faja Petrolífera del Orinoco, la reserva de crudo más grande del planeta con más de 290.000 millones de barriles.
Ante ello, una eventual participación del país asiático en proyectos de construcción de oleoductos, gasoductos, puertos de aguas profundas, espacios de almacenamiento, cuerpos de exportación, vías de acceso, entre otras, según refirió el también ex ministro de Industrias.
A su juicio, China continúa siendo uno de los países aliados más importantes para Venezuela, sobre todo en un contexto en el que la economía local se ha visto gravemente afectada tras la reducción en cerca del 70 por ciento de los ingresos petroleros.
No obstante, la caída vertiginosa de la cotización del crudo no ha sido impedimento para que la nación latina incumpla sus compromisos en materia energética con China, e incluso actualmente evalúa con este país el dise?o de nuevos modelos de inversión en la industria petrolera.
Dentro de estas nuevas inversiones, cabe recordar el acuerdo suscrito en el a?o 2014 entre la estatal Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA) con la empresa china Wison Engineering y las surcoreanas Hyundai Engineering and Construction y Hyundai Engineering, responsables de ejecutar planes de conversión profunda en refinerías del país.
Además, datos oficiales revelan que a inicios de 2015, Caracas habría facturado a Beijing unos 88 mil 894 millones de dólares por la entrega de petróleo y para esa fecha se estimaba que esta cifra se duplicara en el 2017, con el suministro de un millón de barriles de crudo al día a China.
"Nosotros vamos a seguir siendo proveedores seguros de petróleo para China, vamos a garantizar todo el petróleo que requiera China para su desarrollo ... en procesos de reducción drástica de los precios del petróleo internacional, nosotros no incumplimos ninguno de los compromisos contraídos en cuanto a suministro", acotó Menéndez.
Los proyectos binacionales que se prescriben en el mediano plazo, no son menos celebrables que los acuerdos estratégicos así como los logros ya alcanzados por Venezuela y China en el marco de su alianza integral.
De allí es necesario nombrar la contribución de Beijing al desarrollo aeroespacial de Caracas, tributando al lanzamiento de sus dos primeros satélites Simón Bolívar y Francisco de Miranda, valorados cada uno en al menos 400 millones de dólares, así como al desarrollo de un tercer satélite: Antonio José de Sucre.
A ello se suma la capacitación de profesionales venezolanos en materia de tecnología satelital, desarrollo de softwares y manejo desde tierra. "Tenemos casi 2 mil personas que han sido formadas en el tema aeroespacial, 200 de ellas en áreas de postgrado", agregó el ministro.
"El tercero de los satélites que está en fase de desarrollo tiene componentes importantes de dise?o entre ambos equipos y adicionalmente la fábrica de peque?os satélites se está construyendo en Borburata, estado Carabobo (centro-norte) y está próxima a arrancar sus operaciones, en esta planta se va a terminar de ensamblar el satélite", dijo.
La contribución de China a la repotenciación industrial de Venezuela ha trascendido los esquemas tradicionales de cooperación y se ha posicionado en la transferencia tecnológica, logrando la instalación en el país caribe?o de fábricas de computadoras y celulares como Huawei Technologies Co. Ltd, y la Zhong Xing Telecommunication Equipment Company Limited (ZTE).
Por su parte, en el campo automotriz se refirió a la presencia en el país de la fábrica Yutong (Limit) y la inauguración en diciembre del a?o 2015 de una planta en el estado Yaracuy (centro-occidente) que se plantea una producción de 3 mil 500 autobuses por a?o.
"A su vez hoy por hoy una de las primeras plantas chinas de producción de vehículos que son los automóviles Chery alcanzó los mayores niveles de producción y estos vehículos son los segundos más vendidos en el país", precisó el titular.
Otro de los puntos estratégicos de la alianza estratégica integral China-Venezuela guarda relación con el establecimiento de las Zonas Económicas Especiales y las Zonas de Desarrollo Estratégico, que han contado con una inversión monetaria proveniente de empresas chinas, según acotó Menéndez.
Este proyecto a largo plazo, además de contribuir a la diversificación económica venezolana y al impulso de la nación sudamericana en todos los ámbitos, contribuirá también a las capacidades de exportación de China dentro del ámbito de América Latina.