BEIJING, 17 nov (Xinhua) -- A pesar de la nueva política de dos hijos, muchas parejas jóvenes chinas se muestran reticentes a tener un segundo ni?o por el temor a una posible caída del nivel de vida, según una encuesta realizada por el China Youth Daily entre unas 3.000 personas.
El 46 por ciento de los encuestados, más de la mitad mujeres, expresó su deseo de tener un segundo hijo, pero el 52 por ciento teme que tener otro ni?o pueda afectar a su nivel de vida actual.
Lei Lei, residente de Beijing con una hija de dos a?os, descartó tener un ni?o más pese a que su suegra se le pidió, y dijo que el costo de criar a un ni?o es alto y tener otro más repercutirá en una carga financiera ya pesada, pues además del préstamo para su apartamento tiene que contratar a una ni?era para cuidar a su hija.
"Mi marido y yo somos empleados de empresas estatales, y mi sueldo mensual es de 7.000 yuanes (1.100 dólares). Tengo que pagar 5.500 yuanes al mes a la ni?era y no tenemos más dinero para criar a un segundo hijo", dijo Lei, de 28 a?os.
No obstante, Wang Libo, profesora de estudios demográficos de la Universidad Normal de Shenyang, en la provincia nororiental china de Liaoning, indicó que criar a un segundo hijo no supone necesariamente un detrimento del nivel de vida. Los padres no tienen que comprar todo nuevo para el bebé, ya que muchas de las cosas del primer hijo, como ropas o libros, se pueden compartir con el segundo.
Wang Haifeng, cuyo hijo está en cuarto grado de una escuela primaria en Beijing, se mostró sin embargo en desacuerdo, diciendo que los costos de educación representan en la actualidad el mayor gasto de los ni?os.
"Las tutorías de mi hijo me cuestan entre 30.000 y 40.000 yuanes al a?o. Y además tenemos que llevarle de viaje todos los a?os para que amplíe sus horizontes", dijo Wang, de 40 a?os, agregando que "no creo que podamos permitirnos un segundo hijo".
Lin Qingqing, pekinesa de 29 a?os que dio luz a su segundo ni?o hace siete meses, conoce de primera mano la influencia que un nuevo vástago puede tener en la calidad de vida de la familia.
"Los gastos aumentan en todos los aspectos. Además, tengo que dedicar casi todo mi tiempo a cuidar de mis dos hijos".