CSNU pide diálogo entre burundeses para resolver crisis

Actualizado a las 13/11/2015 - 09:39

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El Consejo de Seguridad de la ONU (CSNU) adoptó hoy una resolución en la que pide un diálogo entre burundeses a fin de encontrar una solución burundesa a la actual crisis.

El consejo expresó su profunda preocupación por la actual intensificación de la violencia en Burundi, así como por "el persistente estancamiento político en el país caracterizado por una falta de diálogo entre las partes burundesas", se indicó en la resolución.

Luego de pedir un diálogo entre burundeses, el CSNU enfatizó la necesidad de acelerar los esfuerzos de preparación del diálogo, incluyendo la convocatoria de una consulta previa al diálogo en la que participen todos los facilitadores internacionales pertinentes para garantizar una adecuada preparación del diálogo entre los burundeses y su éxito.

El constante empeoramiento de la situación humanitaria ha obligado hasta ahora a más de 200.000 ciudadanos burundeses a buscar refugio en los países vecinos.

También hoy, el subsecretario general de la ONU, Jan Eliasson; la presidenta de la Unión Africana, Nkosazana Dlamini-Zuma; y la alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, emitieron una declaración conjunta sobre Burundi, informó el vocero de la ONU, Stephane Dujarric.

Los funcionarios expresaron su alarma por una profunda crisis regional y prometieron trabajar juntos para movilizar todos los medios e instrumentos para evitar un mayor deterioro de la situación, dijo Dujarric.

"Los funcionarios coincidieron en la urgencia de convocar a una reunión de los representantes del gobierno y la oposición burundeses en Addis Abeba o Kampala bajo la dirección del presidente ugandés, Yoweri Museveni", a?adió Dujarric.

La ola de violencia continúa después de la reelección del presidente Pierre Nkurunziza, cuyo anuncio sobre la búsqueda de un tercer período en el cargo causó protestas de inmediato.

La oposición y grupos de la sociedad civil se opusieron a su candidatura y afirmaron que el Acuerdo de Arusha estipula que un presidente sólo puede servir durante dos períodos.