BRASILIA, 29 sep (Xinhua) -- Un hombre armado tomó hoy un rehén en el hotel St. Peter de Brasilia, a quien colocó un chaleco con lo que parecen ser cartuchos de dinamita, exigiendo la renuncia de la presidenta Dilma Rousseff.
El Cuerpo de Bomberos, el escuadrón antibombas del Batallón de Operaciones Especiales (BOPE) y la División de Operaciones Especiales de la Policía Civil negociaban este mediodía con el secuestrador, quien mantiene a un empleado del hotel rehén en el piso 13 del hotel.
Según la Policía Civil, el arma que porta el secuestrador es verdadera, pero no es posible determinar con toda seguridad si el chaleco tiene efectivamente material explosivo, en cuyo caso tendría capacidad para volar tres pisos del edificio.
Los negociadores explicaron que el secuestrador no pide ningún rescate, sino que dice que se trata de una acción "terrorista" y sólo hace demandas de contenido político, como la "caída de Dilma", aunque de forma bastante confusa.
De acuerdo con el comisario Paulo Henrique Almeida, cerca de las 14:00, hora local(17:00 GMT), el secuestrador dio un plazo inferior a seis horas para que sean atendidas sus reivindicaciones.
"él nos dio un plazo para atender sus exigencias -salida de Dilma, extradición del (ex militante radical italiano) Cesare Battisti y la aplicación efectiva de la Ley de la Ficha Limpia- y ese plazo está acabando. Dijo que va a explotar, sino las atendemos", apuntó.
La policía aisló un amplio espacio alrededor del hotel St. Peter, y posicionó tiradores de elite en diversos puntos cercanos al lugar.
Ante las amenazas, las autoridades determinaron que fuera realizado un barrido en la terminal de ómnibus de Brasilia, el lugar más concurrido de la capital brasile?a y localizada a unos 500 metros del hotel, para verificar que no hubiera ningún artefacto explosivo en sus instalaciones.