El proyecto de ley en Chile para prevenir la violencia en los estadios de fútbol del país pone en duda la realización de la próxima Copa América, según la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) citada hoy por la prensa local deportiva.
La concreción de esa iniciativa en ley puede llevar a la Conmebol a suspender al país como sede de competiciones de fútbol internacional, incluida la Copa América 2015, prevista del 11 de junio al 4 de julio próximo, se?aló el ente rector del fútbol sudamericano en un carta dirigida a la Asociación de Fútbol de Chile (ANFP).
El proyecto de ley otorga al Ejecutivo la facultad de programar partidos y suspender encuentros, facultad que en la actualidad sólo tienen los clubes.
En caso de que prospere la iniciativa de ley, Chile arriesga la participación de competiciones internacionales de sus clubes y selecciones nacionales y, por extensión, de organización de torneos de la Conmebol como la Copa América, reiteró el organismo en información citada por el diario local "El Mercurio".
La ley contraviene el principio de no injerencia de terceros e independencia, consagrado en el artículo 12 de la Conmebol.
La iniciativa parlamentaria, que cuenta con el respaldo del gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, contempla además elevar las penas por delitos de violencia en los estadios y establecer la responsabilidad de los clubes por desmanes cometidos por sus aficionados.
Los dirigentes de los clubes chilenos descartaron sin embargo una eventual paralización del fútbol como medida de presión.
"Queremos colaborar con la erradicación de la violencia de los estadios. A través del directorio haremos saber nuestras observaciones. Hay que llegar a una buena ley. Hay que eliminar a los delincuentes de los estadios", dijo el gerente general del club Unión Espa?ola, Johnny Ashwell.
La violencia en los estadios de fútbol en Chile fue una de las prioridades del pasado gobierno del ex presidente chileno Sebastián Pi?era (2010-2014), mediante el denominado Plan Estadio Seguro, no obstante, la violencia entre barras bravas o aficionados violentos continúa.