RIO DE JANEIRO, 23 ago (Xinhua) -- La policía de Río de Janeiro sigue investigando el caso de las copas de los Mundiales de Voleibol Masculino y Femenino, robadas el viernes de dentro del camión de una transportadora estacionada en un "shopping" del barrio Barra da Tijuca
Según los medios locales, la policía ya escuchó al motorista del vehículo, que había parado en el centro comercial para entregar otra encomienda y solicitó las imágenes de las cameras de seguridad del shopping en busca de informaciones que puedan aclarar el robo.
Los dos trofeos, que serian entregados en septiembre al campeón del Mundial Masculino que se realizará en Polonia y del Mundial femenino que acontecerá en Italia, habían participado de exhibiciones en ciudades brasile?as y regresaban desde Sao Paulo.
Deberían haber sido entregados en la Confederación Brasile?a de Voleibol (CBF) que los enviaría este sábado a la Federación Internacional del deporte (FIVB) ubicada en Suiza, acompa?ados por un dirigente.
Al tomar conocimiento del robo, ambas las entidades solicitaron, a través de los medios locales, la devolución de las copas, alegando que los objetos no tienen valor comercial.
"Al contrario de la copa del Mundial de fútbol, que tiene valor por ser de oro macizo, las copas de los mundiales de voleibol no poseen valor de mercado. Nadie va a ganar nada con su venta. Su devolución sería una demostración de amor al voleibol brasile?o", aseveró el superintendente de la CBV, Neuri Barbieri.
"Esas copas no tienen ningún valor económico. Tan sólo tienen valor artístico y el valor sentimental de quien va a recibirlo", afirmó, a su vez, el presidente de la Federación Internacional de Voleibol, el brasile?o Ary Graca, en entrevista al canal brasile?o SporTV.
Desde Tokio, donde seguirá ma?ana el partido entre brasile?as y japonesas por la final del Grand Prix de Voleibol, Graca se manifestó confiado de que la policía solucionará el caso, pero agregó que ya entró en contacto con el artista que produjo las copas para encomendar nuevos trofeos en caso de que sea necesario.
Esta no es la primera vez que un trofeo deportivo es robado en Brasil. En diciembre de 1983, la Copa Jules Rimet, conquistada por la selección brasile?a de fútbol de forma permanente por haber sido la primera tricampeona mundial, en 1970, fue robada de la sede de la Confederación Brasile?a de Fútbol, en donde era exhibida.
Había una réplica, pero, irónicamente, estaba en el cofre, mientras la original estaba siendo mostrada. Los ladrones la derritieron para vender los 3,8 kilos de oro con que estaba confeccionada.