Una funcionaria de planificación familiar atiende a una mujer embarazada en Zhengang, Jiangxi. [Foto: Xinhua]
Beijing,08/01/2018(El Pueblo en Línea) Por Wang Xiaodong
Las fusiones departamentales ayudar a los funcionarios a redefinir sus roles.
Durante la mayor parte de sus 13 a?os como funcionaria popular de planificación familiar, la principal tarea de Wang Wanhui ha sido desalentar a los aldeanos a tener más hijos de los que la ley permite.
Ahora, el objetivo de su trabajo está cambiando.
"Antes de que la política nacional del segundo hijo fuera adoptada en 2016, mi trabajo era gestionar los embarazos y el control poblacional", afirma Wang, quien trabaja en Longjing, aldea del municipio Dongfeng en Guiyang, capital de la provincia de Guizhou.
"Las mujeres que ya habían tenido hijos y que utilizaban métodos anticonceptivos como dispositivos intrauterinos, les pedíamos que se chequearan cada tres meses para asegurarnos que estaban bien colocados."
Las prioridades en el trabajo de Wang comenzaron a cambiar hace varios a?os en respuesta a la flexibilización progresiva de la política de planificación familiar.
Sin embargo, el cambio más grande ocurrió a principios del 2016.
"La aprobación de la política nacional del segundo hijo trajo un gran número de nacimientos. A partir de ese momento, la tarea principal de los trabajadores de planificación familiar en nuestra ciudad es la prestación de servicios de atención médica para mujeres embarazadas, especialmente en los casos de alto riesgo, a fin de garantizar su seguridad", a?ade.
Durante ese a?o, dieciséis mujeres en Longjing quedaron embarazadas. Sin embargo, ya en el 2017 fueron veintiséis, incluidos dos casos de alto riesgo: una muchacha de 35 a?os y otra joven que había dado a luz a través de una cesárea, intervención que la hacía vulnerable a complicaciones tales como una ruptura del útero o parto prematuro.
"La mayor parte del tiempo lo empleo en el seguimiento a las mujeres embarazadas que están próximas a dar a luz. También les recuerdo sus visitas al Centro de Salud de Dongfeng para los chequeos y les pido que vengan a mi oficina a recoger dosis gratuitas de ácido fólico", detalla Wang. El ácido fólico puede ayudar a prevenir defectos del tubo neural, una estructura presente en el embrión, del que se origina el sistema nervioso central.
"Yo también les ayudo a registrarse en línea para que puedan obtener beneficios tales como chequeos gratuitos y mejores reembolsos en ciertos servicios durante y después del embarazo. Mi trabajo es arduo porque el médico de la aldea y yo somos las únicas personas disponibles para atender a todas las residentes. Y podríamos llegar a enfrentar procesos disciplinarios si alguien fallece durante el embarazo o el parto."
Wang es una de los casi 200 funcionarios de planificación familiar en el distrito Wudang, de Guiyang, cuyas funciones han cambiado. En mayor medida, ellos han empezado a concentrarse en el trabajo con colegas para proporcionar servicios de salud materna-infantil integrales que se adapten mejor a la política nacional del segundo hijo.
“Durante más de tres décadas, la principal tarea de los funcionarios de planificación familiar fue evitar nacimientos indebidos mediante la promoción y el uso de anticonceptivos”, indica Qin Desheng, director adjunto de la Oficina de Salud y Planificación Familiar de Wudang.
Sin embargo, ese panorama comenzó a cambiar hace unos a?os.
La fusión en los distritos de los departamentos de salud y planificación familiar se tradujo en que ahora, especialmente en la base, los especialistas están mejor vinculados a otros trabajadores de la salud.
"El efecto de la política nacional del segundo hijo en Wudang puede verse claramente establecida con alrededor de 4.000 nacimientos esperados al final de este a?o", destacó Qin en diciembre del 2017.
"En comparación, en el 2016 el número total de nacimientos en el distrito fue de unos 2.000. Muchas parejas que ya tenían un hijo demoraron tener un segundo hasta que la nueva política fue implementada", agregó.
Qin también se?aló que algunas de las parejas de las zonas rurales, tales como aquellos que tenían una hija única, fueron autorizados a tener dos hijos con la esperanza de concebir un varón, permiso que le ayudaría a mantener la mano de obra.
Como en muchas otras partes de China, un gran número de mujeres de Wudang que planean tener un segundo hijo son consideradas de alto riesgo (por ejemplo, las mayores de 40 a?os) por ello es por lo que mejorar la gestión sanitaria se ha convertido en una tarea clave para los funcionarios de salud y planificación familiar del distrito.
"Mientras los galenos de las aldeas proporcionan un servicio estrictamente médico, los funcionarios de planificación familiar tienen otras funciones", admite Qin.
"Ellos, a lo largo de muchos a?os, mantienen un estrecho contacto con los habitantes de las aldeas, y como consecuencia, establecen una amplia red de información de base. Por ejemplo, pueden proporcionar información útil acerca de las mujeres embarazadas y también ayudar a aquellas que planean tener un segundo hijo a que se hagan un chequeo antes del embarazo. Cuando la política nacional del segundo hijo fue implementada, muchos de nuestros especialistas de planificación familiar se quedaron perplejos y no sabían cuáles serían sus nuevas funciones. Creemos que todavía tiene un papel que desempe?ar y hemos organizado programas de capacitación para que puedan brindar un mejor servicio."