Por: Victoria Argüello
CARACAS, 11 ene (Xinhua) -- La salida o permanencia del gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sigue siendo este inicio de a?o la médula de la agenda política local, cuyos principales actores recurren a nuevas formas de confrontación.
Con una ascendente acumulación de fuerzas dentro de la base social, la oposición de derecha ha buscado desde el pasado a?o y de forma incesante múltiples mecanismos para acelerar la salida del poder de Maduro, entre ellos un referendo revocatorio presidencial que no tuvo éxito.
Hace unos días la Asamblea Nacional (AN, Poder Legislativo) declaró el "abandono de cargo" por parte del jefe de Estado, con base en el artículo 233 de la Constitución que establece esta declaratoria como elemento causal de una falta absoluta presidencial.
Al efectuarse esta declaración del Poder Legislativo dentro de los cuatro primeros a?os de gobierno de Maduro, la Constitución establece que deben ser convocadas nuevas elecciones dentro de los próximos 30 días, un anuncio no realizado bajo procedimientos formales por la AN.
Analistas y expertos en materia jurídica sostienen, sin embargo, que es inviable decretar un "abandono del cargo" por parte del presidente Maduro, ya que pese a contemplarse en la Constitución, no existe un escenario real de ausencia en sus funciones.
La ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia, Cecilia Sosa Gómez, consideró improbable que la decisión de la AN tenga un efecto jurídico real, no obstante, dijo que sí puede lograr avances para la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD, derecha) en el ámbito político.
Sosa Gómez explicó que la propia AN puede no estar convencida de su declaratoria, ya que de estarlo habría formalizado la petición al Poder Electoral para que se desarrollen los nuevos comicios, una acción no ejecutada ante este órgano rector.
"Si la Asamblea (Nacional) hubiese estado convencida de que su decisión se iba a ejecutar, hubieran notificado al Consejo Nacional Electoral diciéndole procédase a la convocatoria en 30 días para elecciones presidenciales", subrayó la ex magistrada.
En consonancia con Sosa Gómez, el analista político y director Académico del Centro de Altos Estudios para el Desarrollo y Economía Emergentes, Luis Delgado, se?aló que la declaratoria de "abandono del cargo" tiene una función de agitación política más que jurídica.
"No va a tener repercusión en términos constitucionales, pero es parte de una política para la agitación de masas durante el a?o 2017, para tratar de expulsar del poder a las fuerzas que integran hoy el gobierno", precisó Delgado en entrevista con Xinhua.
Otro elemento que indica la inviabilidad de la declaración del Congreso es su actual situación de "desacato", en la que se mantiene por orden del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), tras no resolverse aún de manera formal la desincorporación de tres diputados opositores cuyo proceso de elección presentó supuestas irregularidades.
La respuesta del gobierno a la decisión de la AN fue la activación de un "Comando Antigolpe", acompa?ada de la denuncia de gestación de un presunto golpe de Estado por parte de los sectores extremistas de la MUD.
Para Delgado, es lógica la activación de este mecanismo que cuenta con el aval de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), ya que considera que la oposición no abandona el escenario de la toma del poder por la vía de la fuerza.
"Ellos no renuncian a la salida de facto, porque más allá de que ellos tengan la fuerza suficiente para derrotar al gobierno, saben que si le dan tiempo al gobierno podría haber una recuperación (de la economía y la situación política), y esa recuperación se podría revertir en contra de la fuerza que han acumulado", dijo el profesor de Ciencias Sociales de la Universidad de Carabobo.
Como en a?os anteriores, Venezuela tendrá signos de fuerte confrontación política, con la diferencia de que en la actualidad se mantiene una mesa de diálogo entre el gobierno y la MUD, que tiene dentro de sus prioridades la resolución definitiva de la crisis económica.
Esta mesa de conversaciones representa para otros actores políticos no alineados con el oficialismo ni con la MUD, un espacio de negociaciones sin confrontación real, el cual persigue una suerte de ejercicio dual del poder o un "bipartidismo" encubierto.
Otro punto que marca la diferencia para la situación venezolana en este 2017, es el lento pero seguro ascenso de los precios del crudo, luego de los acuerdos alcanzados el pasado a?o por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
No obstante, este leve respiro económico debe ir acompa?ado de la reactivación del aparato productivo y el saneamiento de la economía para lograr efectos reales y contundentes que conlleven a la recuperación progresiva del país.
Delgado consideró esta reactivación como parte de una "contraofensiva" que ha prometido el gobierno venezolano y que, a su juicio, ya se ha convertido en un clamor popular.