Fuente: agencias
El cosmonauta Oleg Kotov ha informado que una futura estación espacial internacional puesta en órbita en la Luna será cuatro o cinco veces más peque?a que la Estación Espacial Internacional (ISS), informa TASS, la agencia rusa de noticias.
En comparación, la ISS tendrá 15 módulos, y a causa de sus grandes paneles solares llegará a los 73 metros de envergadura.
Está previsto que la estación esté habitada por cuatro tripulantes y que sus misiones duren entre 30 a 360 días. En principio, habría una misión cada a?o.
“Esta futura estación será crucial para pulir la tecnología clave en la exploración de planetas y otras regiones del espacio profundo”, afirmó Kotov.
Para lograrlo, al igual que ha pasado con el colosal proyecto de la ISS, será crucial la cooperación internacional. En la primavera de 2016 se anunció que las compa?ías Energia (de Rusia) y Boeing (de Estados Unidos) estaban trabajando en dos conceptos para la estación lunar, uno basado en varios módulos peque?os y otro en un gran módulo.
Energia propuso crear una plataforma lunar para finales de 2022 y enviar la primera tripulación en 2025. Rusia ya anunció sus planes para enviar un cosmonauta a la Luna en 2031.
Por su parte, la Agencia Espacial Europea (ESA) propuso en febrero de este a?o su idea de establecer una base permanente en la superficie de la Luna, como fruto de la cooperación internacional.
Antes de construir una estación espacial en la Luna, se cree que es necesario construir cohetes más potentes que los actuales para poder lanzar cargas más pesadas.
Recientemente, las autoridades rusas informaron de que habían comenzado la fase de dise?o para crear cohetes espaciales súperpesados. Sin embargo, el proyecto fue pospuesto el a?o pasado y su aplicación no se incluyó en el programa espacial ruso del período 2016-2025, por lo que no está claro si estos cohetes se materializarán o no.
Antes de eso, tendrá que cumplir con éxito la Misión de Exploración-1, un primer vuelo no tripulado con el SLS. Cuando la fase de pruebas en tierra se complete, se espera que los vuelos no tripulados comiencen en 2018, y que lleven a la nave Orión a la órbita lunar. Si todo va bien, después comenzarían los vuelos tripulados, y el viaje final a Marte se lanzaría en 2030.
El principal objetivo de una futura estación espacial lunar (LOS, por sus siglas en inglés) podría ser el establecimiento de un vínculo entre los aterrizadores lunares y las naves de transporte de la Tierra.