China cuenta con el respaldo de los países árabes en su posición sobre el Mar Meridional de China, aseguraron expertos y estudiosos árabes al comentar las unilaterales iniciativas de arbitraje presentadas por Filipinas.
Manila ha estado presionando unilateralmente para llevar su disputa marítima con China a un tribunal internacional desde enero de 2013.
China ha rechazado esta ilegal iniciativa y se ha negado a tomar parte en el proceso, o aceptar cualquier resultado del arbitraje.
"El arbitraje es aparentemente ilegal con la ausencia de China. Esto es sentido común en el derecho internacional", destacó Mahmoud Allam, exembajador egipcio en China.
Filipinas busca internacionalizar el tema, e intensificar las presiones sobre China a través del arbitraje con la esperanza de forzar cierto compromiso, apuntó Allam.
Su opinión fue apoyada por Yasser Gadallah, director del Centro de Investigación China-Egipto de la Universidad de Helwan de Egipto. "Un arbitraje lo realiza una tercera parte en presencia de las dos partes concernientes, y su resultado tiene únicamente poder vinculante sólo cuando las dos partes estén dispuestas a aceptar el resultado como tal", indicó Gadallah.
China y Filipinas, junto con otros miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, siglas en inglés), firmaron en 2002 la Declaración de Conducta de las Partes en el Mar Meridional de China, que debe servir de marco político para la solución del tema, agregó.
"Es evidente que China y otros países pertinentes de la región han desarrollado su propio método efectivo para la solución del problema a través de las consultas", reconoció Gadallah.
En un comunicado emitido durante la reunión ministerial del Foro de Cooperación China-Estados Arabes celebrada el pasado mes de mayo, los países árabes participantes manifestaron su apoyo a los esfuerzos chinos para resolver pacíficamente las diferencias territoriales y marítimas con ciertas naciones a través del diálogo y las negociaciones.
Enfatizaron además que deben ser respetados los derechos de las naciones soberanas y de los firmantes de la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar (UNCLOS, siglas en inglés) a decidir cómo resolver sus disputas.
"Los países árabes valoran la posición china en los temas de la soberanía territorial", destacó Omar al Hassan, director del Centro de Estudios Estratégicos del Golfo.
"Al igual que las opiniones adoptadas por China respecto a los asuntos regionales del mundo árabe, China cuenta con el respaldo de los países árabes en el arbitraje sobre el Mar Meridional de China", afirmó Al Hassan.
Algunos países han intentado siempre interferir en los asuntos de otros so pretexto de ayudar a resolver los conflictos regionales, subrayó Al Hassan, a?adiendo que las naciones árabes y China deben aferrarse a sus derechos a elegir la forma de resolver los contenciosos.
"El incremento de la atención en el Mar Meridional de China se produce de forma paralela con la estrategia de Estados Unidos de 'pivotar hacia Asia-Pacífico', y sirve al plan de Washington de desplegar un sistema de defensa antimisiles en la Península de Corea", dijo Allam.
"Es simplemente una excusa de Estados Unidos para reforzar su control en Asia y frenar el ascenso de China", puntualizó.
Filipinas es un conocido seguidor de Estados Unidos en Asia, y ha sido un ardid común de Washington para obtener acceso a toda la región con el apoyo de un determinado país, dijo.
China debe endurecer su posición y evitar que cualquier país ajeno interfiera en el tema, concluyó el exembajador.