La compa?ía estadounidense de vuelos espaciales privados SpaceX lanzó esta ma?ana el satélite de medición oceanográfica Jason-3, pero fracasó en su intento de hacer aterrizar la primera etapa de su cohete Falcon-9 sobre un buque en el océano.
"La primera etapa llegó a la plataforma, pero parece que hizo un aterrizaje forzoso; se rompió una pierna. La misión principal sigue siendo simbólica", publicó en Twitter la compa?ía.
El cohete Falcon 9 de la compa?ía con sede en California despegó a las 10:42 hora del Pacífico (18:42 GMT) desde la base Vandenberg de la fuerza aérea en el centro de California para poner en órbita el satélite de monitoreo oceanográfico Jason-3.
La misión internacional Jason-3 es dirigida por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica en asociación con la agencia espacial estadounidense NASA, la Agencia Espacial Francesa y la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos.
La misión seguirá revisando y midiendo con precisión la superficie de los océanos, observará la intensificación de ciclones tropicales y apoyará los pronósticos costeros y estacionales.
El intento de aterrizaje marítimo se produce luego del exitoso aterrizaje del cohete Falcon-9 de Space X en una plataforma terrestre el 21 de diciembre en la estación de la fuerza aérea en Cabo Ca?averal, Florida, lo que es considerado en un importante hito en la industria espacial y un gran paso hacia la reutilización de cohetes.
El a?o pasado, SpaceX intentó aterrizar varias veces su cohete propulsor sobre una plataforma en el océano, pero sin ningún éxito. El intento de hoy es el más reciente en una serie de pruebas de SpaceX para hacer reutilizables partes de cohetes, lo que reduciría el costo de los vuelos espaciales y los haría más sostenibles y asequibles.