MOSCU, 14 jul (Xinhua) -- Los peores escenarios para la economía rusa han sido esquivados y la situación está actualmente bajo control, aseguró el lunes el primer ministro de Rusia, Dmitry Medvedev.
"Los peores escenarios probablemente no han tenido lugar. La situación económica sigue siendo difícil pero está controlada, gracias especialmente al trabajo conjunto del gobierno, el Banco Central y los organismo legislativos", explicó Medvedev durante una reunión gubernamental.
Según declaraciones divulgadas vía Internet por el gobierno ruso, Medvedev instó a los ministerios pertinentes a continuar supervisando la implementación del plan anti-crisis adoptado en enero para garantizar el desarrollo económico y la estabilidad social en medio de las desfavorables condiciones económicas.
La situación y las actividades de las grandes empresas "estratégicamente importantes" deben ser supervisadas y las instrucciones deben implementarse para garantizar que todos los fondos presupuestarios puedan llegar a su beneficiarios finales tales como las empresas industriales y agrícolas, agregó.
El primer ministro reiteró además la importancia de adoptar medidas de apoyo para el sector real, a?adiendo que el gobierno decidió destinar más de 20 mil millones de rublos (más de 354 millones de dólares estadounidenses) de fondos de garantía estatal para 12 proyectos de inversión.
Esos significativos fondos han sido asignados para apoyar al sector agrícola, cuyo volumen de producción se incrementó en un 3,3 por ciento durante los primeros cinco meses del presente a?o, en comparación con igual periodo de 2014, acotó.
A finales de junio, Medvedev declaró que Rusia debía continuar con un presupuesto de austeridad durante un largo periodo de tiempo debido a las persistentes condiciones (económicas)desfavorables.
Varios países occidentales han impuesto sanciones contra Rusia por su supuesto "papel desestabilizador" en la crisis de Ucrania. El 22 de junio, la Unión Europea decidió extender las sanciones anti-rusas por otros seis meses hasta el 31 de enero de 2016 para garantizar que Moscú implemente por completo los acuerdos de paz de Ucrania.