Entrevista con el cineasta francés Jean-Jacques Annaud
Pueblo en Línea:
?Por qué prefiere trabajar desde la literatura?
Jean-Jacques Annaud:
Yo estoy abierto a cualquier forma de inspiración. Por ejemplo, mi primera película la escribí yo mismo. Yo amo la literatura porque me gusta ser seducido por la palabra. Muchos de mis colegas hacen filmes desde piezas de teatro o series de televisión. En mi caso, prefiero trabajar desde la palabra, que no significa que sea exclusivamente desde la literatura.. incluso puede ser desde un artículo periodístico. El texto escrito alienta mi imaginación sin imponer imagenes concretas y me hace sentir libre, incluso si tengo que adaptar una novela como "El nombre de la rosa". De todo el contenido, yo solo necesito 50 páginas para hacer la película. Es lo mismo que me pasó con "El amante", que es un famoso libro de Margarite Duras. Ayer alguien comentaba la adaptación de "Tótem Lobo". La persona que lo hizo me agradecía la dignidad que la película otorga al hombre chino. Yo no había concientizado eso, pero es cierto. Ese es el espíritu que tiene la adaptación. Al abordar "Tótem Lobo" tuve una total libertad para seleccionar los aspectos y pasajes que más me interesaban de la novela y ese es el resultado que se ve en pantalla.
Pueblo en Línea:
?Como llega "Tótem Lobo" a Jean-Jacques Annaud?
Jean-Jacques Annaud:
La empresa china Forbidden City se acercó a mi y me propuso filmar "Tótem Lobo". Ya conocía el enorme éxito que había tenido la novela. Después, cuando la leí me sentí muy afortunado, pues creo que es la novela más hermosa sobre conservación del medio ambiente que yo haya leído. Ha sido un gran honor para mi.
Pueblo en Línea:
?Qué cualidades encontró en "Tótem Lobo"?
Jean-Jacques Annaud :
Yo amo los diferentes niveles de lectura que la novela propone. Una de las cualidades de este libro es su gran valor evocador, pues podía sentir el relato. En muchas de sus páginas veía escenas completas de la película. Al ser extranjero, lo que me impresionó más de la novela fue el tema de la preservación de la naturaleza. Ocurre en China, en un período y lugar específico, pero es un tema universal. En ese período todos hacían lo mismo. Por ejemplo, recuerdo que en los 60 muchos creían que estaba bien talar el Amazonas en Brasil. Y en mi propio país teníamos trenes y barcos que dejaban a su paso una negra estela de smog. En ese período todos cometimos el mismo error. Ahora en muchos lugares del planeta la gente entiende que hay que cambiar los métodos de producción. Y me agrada mucho comprobar que China está consciente de estos problemas ambientales y quiere hacer algo al respecto.