Analistas políticos brasile?os coincidieron hoy en que con la muerte del candidato presidencial Eduardo Campos, del Partido Socialista Brasile?o (PSB), tercero colocado en los sondeos de intención de voto, aumenta la incertidumbre con relación al rumbo de las elecciones generales en el país, en octubre.
Campos murió el miércoles tras la caída de una aeronave en la que viajaba junto a otras seis personas cerca de Santos, litoral del estado de Sao Paulo, provocando una fuerte conmoción en el país sudamericano.
Con su desaparición, la expectativa es que asuma su lugar la ex senadora Marina Silva, quien completaba la fórmula como candidata a la vicepresidencia, aunque también existen dudas sobre ello, puesto que Silva tiene su propio partido político, el Red Sustentabilidad.
Campos y Silva habían sellado una alianza a fines del a?o pasado, y el lanzamiento de la fórmula había generado expectativa al romper la tradicional polarización entre el Partido de los Trabajadores (PT) y el Partido Social Demócrata Brasile?o (PSDB) en el pleito presidencial.
Para el profesor de Administración Pública de la Universidad de Brasilia (UnB), Joao Paulo Peixoto, la muerte de Campos reformula desde su raíz los términos de la disputa electoral.
"El primer impacto es que alteró completamente la disputa, comenzamos una nueva fase. Todas las previsiones que fueron hechas hasta ahora no sirven más. Vamos a comenzar la campa?a de nuevo", dijo el profesor a Xinhua.
Peixoto considera que el rumbo de la campa?a dependerá sobre todo de la decisión del PSB sobre quién ocupará el primer lugar en la fórmula, y en caso de que sea Marina Silva creará sobre todo problemas a la reelección de la presidenta Rousseff, que se postula por el PT.
"Creo que Marina amenaza muchos mas la candidatura de Dilma que la de Aecio. La candidatura de Aecio actúa en la misma linea que actuaba la de Eduardo (Campos), un ex gobernador joven, que defiende la meritocracia y un choque de gestión en la administración pública", se?aló.
El candidato del PSB se ubicaba en el tercer lugar en las encuestas de intención de voto, con 9 por ciento de las preferencias, atrás de la presidenta Dilma Rousseff, del PT, con 38 por ciento, y del senador Aecio Neves, del PSDB, con 22 por ciento.
Para el profesor de Ciencia Política de la UnB, David Fleischer, el escenario electoral queda más incierto con la muerte de Campos porque aumentan las chances de segunda vuelta.
"Si el partido la confirma, la elección tiende a ir para la segunda vuelta. Marina es más conocida que Campos. Disputó la presidencia en 2010 y fue ministra de Lula. Ya en las próximas encuestas tal vez tenga más intención de votos que él", dijo Fleischer a Xinhua.
Según él, en caso de que Silva sea candidata, traerá el tema del medio ambiente para la agenda política, lo que obligará a Rousseff y Neves a incluir la cuestión de la sustentabilidad en sus campa?as.
El profesor de Filosofía Política de la Univesidad de Campinas, Marcos Nobre, apunta que la muerte de Campos fortalece la candidatura de Silva y aumenta los problemas de la presidenta Dilma Rousseff para la disputa electoral.
Al mismo tiempo, considera que el PSB está obligado a proclamar a Silva como su candidata, aunque ella tenga su propia fuerza política.
"Va a haber una presión insoportable para que el PSB lance a Marina. Insoportable. Marina fue bloqueada por el sistema político. Ahora que existe la posibilidad de que alla sea candidata, ?el PSB la va a bloquear también? Sería un precio muy alto para el partido. El PSB no tiene salida", subrayó.
Para el sociólogo José Roberto de Toledo, especialista en marketing político, las implicaciones de la muerte de Campos van mucho más allá de la sucesión presidencial de 2014, por ser el líder del proyecto de poder alternativo a la polarización PT-PSDB que domina el escenario político brasile?o.
Toledo considera que su muerte abre la duda sobre si la viabilidad de una tercera vía sufrirá un retroceso o podrá ser acelerada.
"En el corto plazo, la respuesta depende de la reacción de Marina Silva. Si la vice asume la fórmula presidencial y tiene éxito en galvanizar la conmoción provocada por la tragedia, podrá aspirar a suceder a Eduardo no sólo en la campa?a electoral, sino en el proyecto político que él capitaneaba", consideró.