RIO DE JANEIRO, 17 dic (Xinhua) -- El anuncio de las fabricantes de aviones Boeing y Embraer de unirse para crear una de las mayores constructoras de la aviación mundial enfrenta el futuro gobierno de Jair Bolsonaro, que deberá avalar la operación, y los sindicatos, que ya han expresado su oposición al negocio y temen despidos.
Después de un a?o de negociaciones, la brasile?a Embraer y la estadounidense Boeing anunciaron hoy que aceptan los términos del acuerdo para crear una 'joint venture' valorada en 5.260 millones de dólares. Boeing tendrá el 80 por ciento de la nueva compa?ía tras pagar 4.200 millones de dólares, mientras que Embraer tendrá el 20 por ciento restante.
La operación está en manos ahora del futuro gobierno brasile?o. Desde la privatización de Embraer, en 1994, el gobierno brasile?o tiene una 'golden share' que le da opción de veto en cualquier operación de la compa?ía.
Durante la campa?a electoral, el presidente electo Jair Bolsonaro ya se mostró partidario de la unión, mientras que tras ganar las elecciones, afirmó ante la prensa que "la fusión entre Embraer y Boeing sigue sin ningún problema y la analizaré", y destacó que "si Embraer sigue sola, la tendencia es que desaparezca" debido a la feroz competencia que hay en el mercado.
Tras conocerse el acuerdo, los sindicatos de metalúrgicos de S?o José dos Campos, Botucatu y Araraquara, tres municipios en el estado de Sao Paulo en el que Embraer tiene repartida su cadena de montaje, expresaron su repudio a la operación y afirmaron que representa la "entrega de patrimonio nacional".
Para los sindicatos, la operación representa "la entrega criminal de uno de los más importantes patrimonios nacionales. Al contrario de lo que está descrito en el acuerdo, no se trata de una joint venture y sí de una adquisición. Una joint venture presume que las dos empresas tengan una socia comercial e industrial. No es esto lo que sucederá", resaltaron los sindicatos, que temen despidos tras el acuerdo.
Por su parte, el vicepresidente electo, Hamilton Mourao, afirmó al portal G1 que el acuerdo es "fantástico" para Brasil y "vital" para que Embraer enfrente la competencia internacional.
"Este acuerdo permitirá que seamos más agresivos en este mercado en el plano internacional", dijo Mourao, quien resaltó que la parte de defensa de Embraer seguirá únicamente en manos brasile?as, como defendían los militares.
El acuerdo es un intento de Boeing y Embraer de contrarrestar la unión anunciada el a?o pasado por sus respectivos rivales, Airbus y Bombardier.
Para el presidente de la aerolínea brasile?a Azul (la que usa más modelos Embraer en el país), John Rodgerson, "creo que la fusión es saludable. Cuando Airbus compró Bombardier, no era una disputa justa principalmente debido al poder de negociación que tiene Airbus. Lo interesante es que Airbus compró Bombardier por 1 dólar canadiense, y Embraer está siendo vendida por billones de dólares".
Según él, "esto muestra que, en la última década, quien lo hizo mejor fue Embraer, que vendió mucho más y tuvo tanto éxito que Bombardier tuvo que ser vendida. Pero es difícil que Embraer compita con Airbus, porque su volumen es muy mayor", resaltó Rodgerson.
La expectativa era de que la unión entre la empresa estadounidense y la brasile?a crease una gigante global de la aviación con fuerte actuación en los segmentos de larga distancia y aviación regional.
Se espera que el negocio genere sinergias anuales de 150 millones de dólares y que sólo empiece a dar beneficio a partir de 2020.
El acuerdo también establece la creación de una joint venture para la producción y comercialización de del carguero militar multimisión KC-390. La nueva compa?ía no venderá otros productos militares que fabricaba Embraer, como los aviones SuperTucano, ni cuidará de los contratos de defensa como el sistema de protección de fronteras.
El presidente de Embraer, Paulo Cesar de Souza, afirmó que está "confiado en la asociación" y que "esta alianza fortalecerá ambas empresas en el mercado global y está alineada a nuestra estrategia de crecimiento sostenible de largo plazo".
Embraer es líder mundial en el sector de la aviación regional, con aviones de entre 70 y 130 plazas, mientras que Boeing es la mayor constructora de aviones de larga distancia del mundo.