MADRID, 11 dic (Xinhua) -- Espa?a registró durante el primer semestre de 2018 la peor balanza demográfica desde 1941, ya que marcó la cifra más baja de nacimientos con 179.794 nuevos ni?os, y el número más elevado de defunciones con 226.384 muertes, según un informe presentado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
"Nunca hasta ahora se había producido un crecimiento vegetativo (diferencia entre nacimientos y defunciones) tan bajo", explicaron fuentes de este ente al se?alar que el crecimiento vegetativo del país tuvo un saldo negativo de 46.590 personas en la primera mitad del a?o.
De acuerdo con el organismo autónomo, la natalidad bajó durante los primeros seis meses del a?o un 5,8 por ciento, mientras que la mortalidad aumentó un 2,1 por ciento.
Medios locales se?alaron que este crecimiento en las muertes se produjo por la elevada incidencia de la gripe en los primeros meses del a?o.
Ambas cifras suponen los peores registros de la balanza demográfica en Espa?a desde que comenzó a medirse, en 1941, en una época en la que la situación espa?ola todavía renqueaba debido a los estragos de la Guerra Civil (1936-1939).
De hecho, sólo las familias migrantes impiden que la balanza caiga de manera más contundente, ya que el número de nacimientos de madre extranjera supone el 20 por ciento del total de alumbramientos, según medios locales.
El INE prevé que Espa?a vuelva a perder población en el segundo semestre del a?o.
La cifra de nacimientos comenzó a caer a mediados de los a?os 70, pero repuntó en 1999, al coincidir con el aumento de inmigrantes en el país.
Desde entonces comenzó una época de crecimiento vegetativo positivo que alcanzó su tope en 2008, cuando se registró su cénit con 500.000 recién nacidos.
Sin embargo, se interrumpió y comenzó a caer, con excepción de un peque?o repunte marcado en 2014.