Por Carina López
MEXICO, 12 abr (Xinhua) -- Gobernantes de América Latina pueden alcanzar un acuerdo regional en materia de prevención y combate a la corrupción durante la VIII Cumbre de las Américas, que se efectuará el 13 y el 14 de abril en Lima, Perú, afirmó hoy el internacionalista mexicano, Ulises Granados.
"Se espera que se hagan varias declaraciones por parte de jefes de Estado y de gobierno sobre la lucha contra la corrupción, lo cual toma especial relevancia tras el reciente encarcelamiento (por corrupción) del ex mandatario de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva", dijo el catedrático del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM, privado), en entrevista a Xinhua.
De acuerdo con el Indice de Percepción de la Corrupción 2017, publicado en febrero de 2018, sólo 11 países registran más de 50 puntos dentro de un puntaje de 0 a 100, según el cual 0 es muy corrupto y 100 muy transparente.
"Es posible que se logren acuerdos en esta materia, a través de una comunicación más directa entre agencias de aplicación de la ley, así como una comunicación muy estrecha entre distintas Fiscalías de AL y, a su vez, exigirles que aumenten la transparencia de sus actividades", se?aló Granados.
La corrupción será el principal asunto que se tratará en la VIII Cumbre de las Américas.
En el tema comercial, el académico urgió a los países integrantes del Acuerdo de Asociación Transpacífico-11 (TPP, por sus siglas en inglés), que excluyan a Estados Unidos, a ratificar el convenio en sus poderes legislativos para poder lograr un avance real y sustancial a nivel regional.
"América Latina tiene todo un mundo por explorar, y si no rompemos el vicio de la dependencia económica con Estados Unidos, no vamos a poder nunca quitarnos la sombra de las reacciones del país vecino frente al hemisferio", sostuvo.
En adición, Granados comentó que "nos encontramos ante un momento de oportunidades para que otros países extrarregionales consoliden sus relaciones con países de AL, como es el caso de las naciones europeas y asiáticas".
"La clave para el desarrollo de AL es diversificar a sus socios comerciales, así como una mayor inversión en educación, ciencia y tecnología", agregó el profesor del ITAM.
El internacionalista declaró que la reciente cancelación de la asistencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la Cumbre de las Américas demuestra su falta de interés por América Latina para avanzar en proyectos de integración del continente.
"Trump está preocupado por el crimen y por el trasiego de drogas por territorio centro y sudamericano, pero no existe para América Latina una visión clara de cómo puede ayudar al continente", explicó.
El mandatario estadounidense decidió el pasado martes cancelar su primer viaje oficial a América Latina y envió en su lugar al vicepresidente Mike Pence, quien asistirá a esta reunión de alto nivel en Perú.
Desde el inicio de su mandato, Trump tuvo una relación complicada con el continente debido a su retórica antiinmigrante, su promesa de construir un muro con México y su proteccionismo comercial.
"La visita de Trump a la Cumbre generaba una gran expectación, debido a que se creía que el presidente comenzaría a limar asperezas con distintos países de la región, entre ellos, México; sin embargo, esto no sucedió", expresó Granados.
El especialista en Relaciones Internacionales afirmó que la Cumbre representa una oportunidad para dirimir diferencias políticas entre los países de este hemisferio, para integrar la región y fortalecerla.
"En el encuentro se podrán identificar los problemas comunes que tendrá que enfrentar la región en los próximos a?os y analizar distintas vías de solución a los conflictos más importantes", agregó.
Por más de una década, los jefes de Estado y de gobierno se han reunido periódicamente en la Cumbre de las Américas para abordar temas de interés común, buscar soluciones y desarrollar una visión compartida para el desarrollo futuro de la región, ya sea de carácter social, económico o político.
Este proceso es vital para establecer y alcanzar metas en América, y es de esa forma como la Organización de los Estados Americanos (OEA) recibe la mayoría de sus mandatos.
La OEA actúa como secretaría técnica del proceso de estas cumbres.