Los ni?os interactúan con aparatos aeroespaciales en la base militar de ciencias aeroespaciales, en Qinhuangdao. Foto: Pueblo en Línea
Recientemente, han surgido temores de que el regreso a la Tierra de la estación espacial pueda constituir un peligro. Durante una entrevista concedida a la prensa, Zhu Congpeng, dise?ador jefe del laboratorio de experimentos espaciales del Grupo Nacional de Ciencia y Tecnología Aeroespacial, indicó que China mantiene un control permanente sobre la estación Tiangong-1, previendo su caída para la primera mitad de 2018.
Zhu asegura que, tras entrar en la atmósfera terrestre, la estación se desintegrará, y las piezas restantes deberían caer en el océano, no constituyendo ningún peligro.
De hecho, existen convenciones internacionales para el control de la caída de aparatos espaciales. Pang Zhihao, un experto en cuestiones aeroespaciales, afirma que los procedimientos internacionales para la caída de un aparato aeroespacial indican que esta debe dirigirse hacia el sur del océano pacífico, lugar también llamado "cementerio espacial".
La estación espacial rusa Mir, así como la nave espacial Progress, y el observatorio Compton Gamma Ray de EE.UU cayeron en el Pacífico sur.