BRASILIA, 10 ago (Xinhua) -- Tras haber logrado el objetivo que se fijaron para los Juegos Olímpicos, las futbolistas chinas sue?an en grande en Brasilia, la ciudad del futuro.
El martes, con un empate frente a Suecia, las "rosas de acero" chinas llamadas así por el segundo lugar obtenido tanto en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 como en la Copa Mundial 1999, consiguieron pasar a cuartos de final por primera vez desde los Juegos Olímpicos de Sidney 2000.
"Estuvimos ausentes en la ceremonia de inauguración. Queremos quedarnos aquí más tiempo para asistir a la ceremonia de clausura", dijo la capitana Li Dongna.
"Logramos nuestro objetivo para el torneo. Nuestro esfuerzo ha valido la pena. Si derrotamos a Alemania en los cuartos, enloqueceré de alegría", a?adió.
El camino a Río no fue fácil. Ni su carrera en China. Después de 650 días de arduo entrenamiento, la nueva generación de "rosas", con una edad promedio de 23,5 a?os, derrotaron 1-0 a Holanda para conseguir su primera victoria en una Copa Mundial Femenil y llegaron a los cuartos de final en Canadá en 2015.
Pero el resultado ganado con tanto esfuerzo no trajo un rápido desarrollo del deporte para las futbolistas del país. En comparación con el despilfarro de dinero en la búsqueda de superestrellas extranjeras de los clubes de la Súper Liga China, la Súper Liga Femenil de China de alto nivel todavía es pasada por alto.
El equipo nacional también fue ensombrecido por la dimisión en agosto de 2015 del entonces entrenador Hao Wai, luego de terminar al final de la tabla con tres derrotas consecutivas en la Copa Femenil 2015 de la Federación de Fútbol del Este de Asia.
En septiembre de 2015 finalmente apareció un resquicio de esperanza cuando el ex entrenador francés Bruno Bini tomó las riendas en septiembre de 2015. El segundo entrenador francés a cargo del equipo, quien guió a su selección nacional al cuarto lugar tanto en la Copa Mundial Femenil 2011 como en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, estaba decidido a devolver a las "rosas" su antigua gloria.
El francés de 61 a?os de edad es como un padre a los ojos de estas jóvenes chinas. Bini ha unido el equipo y ha desarrollado un sistema de estrategia con tácticas que enfatizan el control y pase de balones. Incluso formuló un objetivo de largo plazo para el equipo: ganar un boleto para la Copa Mundial Femenil Francia 2019.
Con Bini al frente, China derrotó al cuatro veces campeón olímpico Estados Unidos en un partido amistoso, con lo que terminó con la racha del rival de 104 victorias consecutivas en casa.
Lo que más ha impresionado a los aficionados de China ha sido su campa?a como invictas en el torneo de clasificación olímpica femenil en 2016, en el que consiguieron su boleto para Río.
China superó 2-0 a Vietnam para conseguir su primera victoria en el torneo, derrotó a Japón y República de Corea y empató con República Popular Democrática de Corea y con el ganador final Australia.
"El equipo chino se ha vuelto más agresivo. Solían esperar los contraataques", dijo el entrenador brasile?o Oswaldo Alvarez.
A pesar de perder 3-0 frente al anfitrión Brasil el 3 de agosto en el primer juego de los Juegos Olímpicos de Río, China venció el sábado 2-0 a Sudáfrica y empató hoy 0-0 con Suecia, con lo que llegó a cuartos de final.
El viernes, las "rosas" jugarán contra Alemania en Salvador, una ciudad portuaria del este de Brasil.
"Hemos llegado hasta aquí. Deseamos ganar sin importar cuán fuerte sea nuestro rival", dijo Li.
"No tenemos mucha ventaja sobre Alemania, pero todo puede pasar", a?adió.
Pero las chinas ven algo más que un partido o un torneo. Esperan que China promueva el deporte para cultivar más "rosas".
Con una edad promedio de 24.3 a?os, se espera que las "rosas" actuales" hayan florecido por completo para la Copa Mundial Femenil Francia 2019 y para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Las jugadoras chinas deben mantener la constancia a fin de convertirse en un equipo más fuerte en el deporte, dijo Bini.