Las delegaciones del gobierno y la guerrilla de Colombia acordaron hoy en La Habana un mecanismo de monitoreo y verificación de un alto el fuego bilateral y definitivo para el país sudamericano.
Este equipo será tripartito, integrado por representantes designados por el Gobierno y la guerrilla, e incluirá un componente internacional, informaron las partes en una declaración conjunta en la capital cubana.
De acuerdo con el texto, el mecanismo incluirá una misión internacional escogida por la Organización de Naciones Unidas (ONU), la cual comprobará además la dejación de las armas por parte de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El grupo de verificadores internacionales estará conformado por expertos civiles de países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribe?os (CELAC), precisa la información brindada a los medios.
Ese colectivo internacional presidirá al mecanismo de verificación y coordinará sus labores, que comenzarán cuando se haya firmado el acuerdo para la paz, y también estará autorizado para dirimir controversias, realizar recomendaciones a las partes colombianas y presentar informes.
En cuanto a la entrega de las armas por parte de la insurgencia, esa misión internacional "la verificará en los términos y con las debidas garantías que se establecerán en los protocolos del acuerdo", precisa el texto, leído por representantes de Cuba y Noruega como países garantes del proceso de paz para Colombia.
"Hemos decidido solicitar al Consejo de Seguridad de la ONU la creación desde ya de esa misión política con observadores no armados por un periodo de 12 meses, prorrogables a petición del Gobierno y las FARC", indicaron las partes.
Asimismo solicitaron que esa misión inicie los preparativos necesarios, "en estrecha coordinación y colaboración con el Gobierno de Colombia y las FARC, para su despliegue", y aseguraron que los observadores internacionales gozarán de "plenas garantías de seguridad".
El Gobierno y la guerrilla de Colombia iniciaron la semana pasada en La Habana la etapa final del proceso de negociaciones de paz iniciado en noviembre de 2012, que busca poner fin a una guerra interna de más de medio siglo.
Hasta el presente, las partes han logrado consenso en cuatro de los cinco puntos que componen la agenda del diálogo: reforma agraria y desarrollo rural; participación política de los rebeldes; drogas y narcotráfico; y reparación y justicia para las víctimas del conflicto.
En las rondas de pláticas en La Habana, a las partes solo les falta ponerse de acuerdo en el último punto de la agenda, relativo al fin del conflicto, con un plazo eventual fijado para el 23 de marzo, como fecha tope para sellar definitivamente la paz.