Por Chi Fulin
Hoja de ruta para lograr una sociedad moderadamente próspera
Trabajadores refuerzan un puente sobre el río Yangtze en Jiujiang, provincia de Jiangxi. [Foto: China Daily]
Pekín, 30/10/2015(El Pueblo en Línea)- La recién concluida quinta sesión plenaria del 18 Comité Central Partido Comunista de China ha elaborado un plan de trabajo para los próximos cinco a?os con el objetivo de lograr una sociedad moderadamente próspera, de forma generalizada.
Para que este plan sea una realidad, China tiene que elegir un camino de crecimiento económico adecuado, en función de las tendencias económicas resultantes de su transformación, de manera que mantenga una sólida base y se pueda desarrollar –de forma sustentable- la meta de lograr una sociedad moderadamente próspera.
Para lograr los objetivos del Plan Quinquenal decimotercero (2016-20), China necesita un crecimiento económico sostenido de alrededor del 6,5 por ciento anual hasta el 2020. Los cambios en la tendencia del crecimiento económico del país, la estructura y la fuerza motriz garantizan una tasa de crecimiento económico moderado. Esta es una meta alcanzable.
La acelerada transformación del país de una economía de producción manufacturera a una definida por los servicios y la fabricación de "Internet-plus" creará ventajas competitivas, mientras que la urbanización en curso, facilitada por la reforma del hukou (sistema de registro de población) y los esfuerzos para promover un aumento del consumo, lubricará la transformación tan esperada del país. El esperado crecimiento del consumo y los servicios impulsará el crecimiento económico nacional.
También se espera un nuevo progreso en los esfuerzos continuos de China para realizar el ajuste estructural de la economía y aumentar la contribución de los servicios del 51,4 por ciento del PIB en el primer trimestre de este a?o hasta más del 55 por ciento para el 2020. El crecimiento del consumo interno consolidará un duradera fuerza motriz para el crecimiento económico del país.
El esfuerzo por elevar la proporción del comercio de servicios en el comercio exterior del país, que debe aumentar del 12,3 por ciento (2014) al 20 por ciento (2020), ayudará a afinar la ventaja competitiva de China en el comercio regional y mundial. Al mismo tiempo, la intensificación de los esfuerzos para profundizar las reformas aliviará la presión sobre la economía y sentará una base importante para crecer entre el 6 y el 7 por ciento, a mediano y largo plazo.
Para desatar una nueva vitalidad en el crecimiento económico, el país debe abrir su mercado de servicios y seguir la tendencia del desarrollo general del sector. Un mercado de servicios totalmente abierto, atraerá más inversiones directas de capital extranjero e impulsará el comercio de servicios del país, formando una estructura económica -a plena capacidad- dominada por los servicios. Con este fin, primero China debe romper el 50 por ciento del monopolio que existe en este sector y aumentar la apertura y la calidad, a la vez que logra reducir los precios.
El desmantelamiento del monopolio administrativo en el sector de los servicios facilitará absorber más capital no estatal y activar el latente vigor del mercado. Al mismo tiempo, el país también deberá impulsar la apertura y ampliación del mercado de servicios, con el fin de dar a los actores del mercado y a los no estatales un papel más importante en el suministro de los servicios públicos.
Teniendo en cuenta la serie de contradicciones estructurales y desafíos que ahora enfrenta el país en su empuje hacia la transformación industrial, liderado por el sector de servicios, también es necesario acelerar las reformas estructurales en la inversión, el mercado financiero, fiscal, de impuestos y en el ámbitos educativo, eliminando los obstáculos existentes.
Las reformas necesarias deben ser ejecutadas para cambiar las condiciones actuales, dentro de la cual hoy el capital no estatal representa una proporción muy baja de los fondos para la prestación de servicios educativos, de salud y culturales. Sin eliminar los obstáculos del camino para atraer la entrada de capital no estatal en estas áreas, será difícil para China establecer una estructura industrial determinada por los servicios.
El autor es presidente del Instituto de China para la Reforma y el Desarrollo.