RIO DE JANEIRO, 8 jul (Xinhua) -- El exfutbolista y actual senador brasile?o Romario da Souza acusó hoy a la corrupción imperante que hay en la Confederación Brasile?a de Fútbol(CBF) de la "mayor humillación" sufrida por la selección nacional, en alusión al humillante 1-7 encajado hace exactamente un a?o contra Alemania en las semifinales del Mundial de fútbol de Brasil 2014.
"Hace un a?o, la selección de fútbol masculino de Brasil entraba al campo para sufrir la mayor humillación de su historia: encajar una goleada de 7-1 por parte de Alemania en una Copa del Mundo en casa", escribió Romario en su perfil de Facebook.
Dijo que, igual que "millones de brasile?os", se sintió "triste" por el partido, pero a?adió que él, además, sintió algo que sólo "quien ha estado en el campo con esa camiseta podría sentir: impotencia".
El campeón del mundo en 1994 lamentó que el fútbol brasile?o se está "deteriorando" y que, pese a sus intentos desde el Congreso primero y ahora en el Senado, el "solo" no es capaz de "cambiar algo", y acusó a los dirigentes de la CBF.
"El expresidente y actual vicepresidente de la CBF, José María Marín, está preso en Suiza, y el actual, Marco Polo Del Nero, con la soga al cuello y a punto de ser arrestado, no tiene ni el coraje de dejar el país para acompa?ar (a la selección) en las competiciones oficiales", acusó el exjugador del Barcelona, Flamengo, Vasco da Gama y Fluminense entre otros.
Romario también criticó al agente de jugadores y actual coordinador técnico de la selección, Gilmar Rinaldi, por defender "sus propios intereses en la convocatoria de jugadores", algo que ha provocado que la selección brasile?a continúe con "su trayectoria de derrotas" y que la femenina se encuentre en estado de "abandono".
"Por suerte, esa tela de corrupción comenzó a ser desmontada por el FBI", dijo Romario, quien consideró que la "cuadrilla" de la CBF dejó cabos sueltos en Estados Unidos y eso posibilitó que uno de sus "jefes", Marín, acabará en prisión.
"Necesitamos de un cambio estructural profundo", concluyó Romario, quien abogó por una "nueva era" en el fútbol brasile?o, marcada por "una buena gestión, transparencia, alternancia del poder, responsabilidad fiscal e inversión en el fútbol base".