El "Plan de acción de tres a?os para la mejora del entorno de vida rural" se aprobó el 20 de noviembre de 2017, en la primera reunión del 19o Grupo Central para la Reforma de Profundización Integral. La conferencia presidida por el presidente Xi Jinping marcó el comienzo de la "revolución de los inodoros" de China a nivel nacional.
En la China actual, los inodoros con descarga se han convertido en el servicio básico para la mayoría de las familias, y los ba?os públicos se pueden encontrar fácilmente en todas partes en la mayoría de las ciudades. Solo había 500 ba?os públicos en Beijing en 1949, mientras que en 2018, la cantidad de ba?os públicos en Beijing fue de 19.008, ocupando el primer lugar en el mundo entre las megaciudades. Dentro de la cuarta carretera de circunvalación de la ciudad, hay unos 20 ba?os públicos por kilómetro cuadrado, y las personas pueden encontrar ba?os a 5 minutos a pie. China ahora se está concentrando en resolver este difícil problema en sus regiones rurales.
La revolución del inodoro también es un tema global. Según la Organización Mundial del Retrete, hay 2.400 millones de personas en el mundo que no tienen retretes o viven en entornos con mala higiene del retrete.
Esto ha provocado una gran cantidad de enfermedades en algunos países, ya que las aguas residuales directas contaminan el suelo, los alimentos y el agua. Como medida importante de los servicios turísticos, los ba?os a veces se consideran la clave de la reputación y la confianza de las inversiones de un país. La Asociación de Aseos Públicos de Singapur cree que la cantidad total de tiempo que una persona pasa en el ba?o en toda su vida es más de tres a?os, por lo que el ba?o es vital tanto para las personas como para un país.
En la cultura tradicional de China, los inodoros eran lugares incómodos y con mal olor. Sin embargo, con la economía social los ba?os familiares, limpios e higiénicos, se han convertido en la norma. En algunas áreas densamente pobladas y atracciones turísticas, los ba?os públicos son escasos. En particular, algunos inodoros están sucios, desordenados y con malas instalaciones, lo que fácilmente puede dar al turista una mala experiencia.
Por lo tanto, ya sea para la revitalización rural o la mejora del saneamiento, la renovación de la construcción de ba?os se ha vuelto indispensable en los proyectos de medios de vida locales.
La revolución del ba?o es anacrónica en diferentes períodos históricos. Expertos y académicos definen la revolución como un proceso gradual destinado a mejorar la salud pública y la calidad ambiental.
La revolución de los inodoros pasó de la gestión del estiércol en los primeros días de la fundación de República Popular de China, a la atención primaria de salud en la década de 1980, la creación de ciudades sanitarias en la década de 1990, a través de la mejora del entorno de vida rural actual, y está en en línea con la estrategia general de desarrollo de China.
Según el Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales, a finales de 2019, la tasa de penetración de los inodoros rurales en China era de más del 60%. Cuando el "XIII Plan Quinquenal" llegó a su fin en diciembre de 2020, la tasa de penetración de los inodoros en las áreas agrícolas y pastorales del Tíbet superó el 45%, el 85% en las zonas rurales de Henan y el 59,3% en Xinjiang. Además, 10,75 millones de hogares en la región rural de Shandong completaron la renovación de los inodoros.
El inodoro es una medida de civilización y una nota al pie del desarrollo de China. El inodoro refleja los cambios en los hábitos de higiene de las personas, afecta la experiencia de viaje de cientos de millones de personas y la construcción general de los hermosos pueblos de China. La revolución de los inodoros implica asumir más responsabilidades.