RIO DE JANEIRO, 22 feb (Xinhua) -- A pesar de la gran polémica que genera, la telemedicina, es decir, las consultas, diagnósticos y cirugías a distancia, ya es una nueva realidad en Brasil, gracias a la autorización que dio hace unos días el Consejo Federal de Medicina (CFM) para que tanto los servicios médicos públicos como los privados puedan atender a distancia.
La CFM anunció que a partir de mayo autorizará a los médicos del país para poder atender a los pacientes a distancia, aunque el gran número de críticas recibidas, principalmente por los consejos regionales de medicina, hizo que la entidad dejara abierta la posibilidad de revisar la nueva normativa.
Para los partidarios de la telemedicina, la práctica ya es usada actualmente por muchos médicos y pacientes, que de manera informal, intercambian preguntas y soluciones por servicios de mensajería en internet.
"Es algo que ya existe. Si nos ponemos a mirar, hay miles de pacientes que buscan comunicarse con su médico o médica a través del teléfono o el ordenador y así no tienen que desplazarse hasta el centro sanitario. Lo único que hizo la CFM fue regularizarlo", afirmó a Xinhua la doctora Jana Sampaio, de la red de sanidad privada de Río de Janeiro.
Según Sampaio, los ejemplos más habituales en los que los pacientes se ponen en contacto con sus médicos a distancia son por el envío de fotos de problemas en la piel, resultados de exámenes y dudas sobre la prescripción de tratamientos.
Asimismo, otros servicios, como las teleconsultas y el teletratamiento, también han sido utilizados por hospitales y convenios de salud.
La doctora carioca tiene claro que "la nueva normativa aumenta la seguridad de las empresas, médicos y pacientes, y permite ampliar los servicios en la red de salud y desatascarla".
Uno de los servicios de telemedicina más usados actualmente son las llamadas teleinterconsultas, en las que un médico comparte la atención con otro profesional en busca de una segunda opinión. Este modelo ya era regulado por el CFM.
Otras atenciones que involucran contacto de médicos y pacientes, como el teletriage y la telerecomendación, han ganado impulso en el país incluso sin regulación. En estos casos, el paciente se conecta a una central y resuelve sus dudas con un clínico general o especialista sobre el camino que debe seguir dentro del sistema sanitario.
La telemedicina también permite que el operador pueda enviar un médico a casa del usuario o indicarle que vaya a un puesto de salud, si hay necesidad, así como enviar una ambulancia.
Por su parte, el director médico de la aseguradora Omint, Marcos Loretto, afirmó que "es necesario que quede muy claro que la telemedicina es una herramienta y en ningún caso substituye al profesional. De la misma forma con que el médico usa el estetoscopio para examinar el paciente, puede usar la telemedicina para auxiliar en el día a día", aseguró.
Las entidades regionales de medicinas critican que la telemedicina hará que haya menos visitas a los centros médicos y pone en duda la seguridad de los datos de los pacientes, aunque la CFM precisamente alega que una de las virtudes del sistema es que el habitualmente colapsado sistema sanitario brasile?o tendrá menos pacientes, y facilitará el atendimiento en las regiones más aisladas.
"Es algo que ya ocurre en otros países, como Estados Unidos, Canadá o Israel, donde incluso los pacientes pueden ser examinados a distancia en tiempo real por su doctor con dispositivos electrónicos", comento Loretto.