SHANGHAI, 6 nov (Xinhua) -- Empresas de varios países de habla hispana están apostando por tener presencia en las grandes plataformas de comercio electrónico chinas para acercar sus productos a los consumidores del país asiático, en el que este sector ha registrado un gran desarrollo en los últimos a?os.
Tras un encuentro organizado por Alibaba dentro de la primera Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE), en el que estuvieron hoy martes presentes representantes de varios países latinoamericanos y de Espa?a, el ministro de Comercio Exterior y Turismo de Perú, Rogers Valencia, expresó en declaraciones a Xinhua el interés de su país por colaborar con las plataformas de comercio electrónico.
Perú cuenta con una iniciativa propia orientada a peque?as y medianas empresas y que aspira a incluir a más de 200 firmas este a?o. Esta plataforma, indicó, está conectada con la de Alibaba y otras empresas de comercio electrónico en China, lo que permite vender productos peruanos fuera de su país de origen.
“Creemos que es el futuro, creemos que hay un gran potencial de los productores peruanos para llegar al consumidor final”, afirmó.
En la actualidad ya se venden productos frescos como uvas, arándanos, mango y langostinos y textiles de lana de alpaca. Lo próximo, agregó, serán productos con quinoa y granada.
Por su parte, el consejero comercial de Proméxico en Shanghai, Alejando Salas, explicó que fue el aguacate el que provocó la entrada de México en los canales de venta en internet.
Hace cinco a?os que el país comenzó a colaborar con Alibaba por su “inusitado interés” en esta fruta, que goza de “mucha demanda” en China. Para ilustrarlo, Salas se?aló que en el 11/11 del a?o pasado (una jornada de descuentos para las compras en internet muy popular en China) se vendieron un millón de piezas de aguacate de México en 10 horas.
Las relaciones con Alibaba, indicó, fueron a más cada a?o y en septiembre de 2017 se firmó un convenio para favorecer que las peque?as y medianas empresas mexicanas sepan cómo entrar en este tipo de plataformas en China, puesto que se detectó que había compradores, pero “pocos vendedores”.
En la actualidad se pueden encontrar productos mexicanos del sector de la alimentación como uvas de mesa, langosta de Baja California y carne de res y de cerdo, y el país espera que la lista aumente con el plátano y el sorgo. Asimismo, los consumidores chinos pueden encontrar otros productos, como autopartes, artesanía o textiles, destacó.
El director comercial de Chile en Shanghai, Juan José Vidal, destacó que ayer y hoy su país firmó dos acuerdos de cooperación con empresas chinas, Suning y Win Chain (Alibaba), en este ámbito. “Lo fuerte van a ser los productos frescos: fruta, carnes, salmón”, dijo.
Otra de las líneas de trabajo son los vinos chilenos, que ya han colocado “marcas importantes” en el mercado chino, expuso Vidal.
Dentro de la CIIE, recordó, el país presenta cinco de sus marcas, que agrupan a productores de aceite de oliva, frutas frescas, carne de cerdo, aguacate y vinos.
El consejero económico y comercial jefe en Shanghai del Instituto de Comercio Exterior de Espa?a (ICEX), Alfonso Noriega, explicó que la relación con las plataformas de comercio electrónico chinas “es muy fluida y cada vez más intensa porque hay más productos espa?oles”.
Hace cuatro o cinco a?os los productos con más presencia eran el aceite de oliva o el vino y, aunque se mantienen, con el gran impulso del comercio electrónico se ha producido un auge de los cosméticos espa?oles en el mercado chino. “Ahora mismo han colocado a Espa?a como uno de los seis principales proveedores de cosmética de China”, indicó.
Esto ha favorecido que las empresas dedicadas al sector hayan invertido más y ampliado capacidad productiva en Espa?a. “Deseamos que esas inversiones que están acometiendo gracias a las oportunidades que ofrece el mercado de China se mantengan y se apueste por cada vez una mayor apertura y por una estabilidad en el marco normativo de acceso”, se?aló.
El futuro es, a juicio de Noriega, “prometedor” y la progresión, “positiva”, aunque ha enfatizado que las empresas deben ser conscientes de la realidad del mercado chino: “Es muy grande pero no es sencillo”, advirtió. En este sentido, aconsejó “cabeza” y explorar las vías para posicionarse ante los consumidores chinos.