Por Yasef Ananda
Beijing, 07/07/2017 (El Pueblo en Línea) -Por estos días, los pueblos incas, guaranis, kollas, mapuches, aymaras, entre otras comunidades de América del Sur, conmemoran el a?o nuevo andino amazónico, momento propicio para renovar el compromiso de continuar “criando” y cuidando los ecosistemas que conviven gracias a la benevolencia de la Pachamama y al ígneo poder del Inti Tata.
En la capital de China, auspiciado por el Centro de Diplomacia Pública e Intercambio Cultural de Beijing y organizado por la embajada de Perú, en coordinación con las misiones diplomáticas de Bolivia y Ecuador, decenas de ciudadanos chinos y residentes latinoamericanos se dieron cita en el Club China del parque Ritan (altar del sol, en idioma chino) para celebrar el Inti Raymi-Willka Kuti, inspirados en renovados deseos de construir un futuro de destino común para China y América Latina.
“Quizás una de las coincidencias más hermosas de nuestra región es el tributo al Sol como homenaje al espacio y al mundo. Por ello, llegado cada mes de junio, los tres países andinos celebramos”, destacó en su intervención el Sr. Juan Carlos Capu?ay, embajador de Perú en China.
De acuerdo a los textos de Garcilaso de la Vega, durante la época de los Incas, el Inti Raymi era el más importante de los cuatro festivales celebrados en el Cusco. La fraterna cita, que daba inicio al nuevo a?o agrícola, duraba 15 largos días donde no faltaban las danzas y los sacrificios.
Entre bailes y cantos ancestrales, los peruanos, ecuatorianos y bolivianos residentes en Beijing protagonizaron la alegre conmemoración. Además, los invitados chinos pudieron bailar y degustar lo mejor de la gastronomía autóctona andina elaborada con ingredientes típicos como la quinua y la papa colla.
“Todos los pueblos tienen sus tradiciones. Nosotros tenemos el a?o nuevo lunar, y siempre nos agrada que en otras partes del mundo se respete y celebre”, destacó Cheng Ruijie, guía de turismo internacional. “Celebrar el Inti Rami en China nos permite un nuevo tipo de contacto pueblo a pueblo, es decir, con los residentes latinoamericanos que viven y trabajan en China”.
El último Inti Raymi con la presencia del emperador inca fue realizado en 1535. A?os después, en 1572, el virrey Francisco álvarez de Toledo lo prohibió por considerarlo una ceremonia pagana y contraria a la fe católica, aunque continúo de manera clandestina. Ya en 1944, Faustino Espinoza Navarro ejecutó una reconstrucción histórica del Inti Raymi. Desde esa fecha, la ceremonia volvió a ser un evento público y cobró gran atractivo turístico.
El Inti Raymi está ligado al solsticio que se registra como fenómeno natural entre el 20 de junio y el 23 de junio en el hemisferio sur, siendo este el día que tienen la noche más larga y menos horas de luz.
“Recomiendo que el a?o próximo la celebración del Inti Raymi se haga más cercana a la original, es decir, que inicie con los primeros rayos de sol aunque tengamos que levantarnos muy temprano”, a?adió Cheng.
Horas después, en el sosegado poniente del céntrico parque Ritan, la voz poética del alma andina aún resonaba:
Los descendientes del Inca/ se reúnen fervorosos/ en algarabía ancestral/ para pedir a su padre Sol/ la ansiada libertad.