BEIJING, 24 may (Xinhua) -- Muchos residentes de los 'hutongs' (callejones tradicionales) del centro de Beijing nunca hubieran so?ado que un riachuelo fluyera frente a sus puertas.
En el siglo XV había un río en la zona de Qianmen, cerca de la Plaza de Tian'anmen, el centro geográfico de la ciudad.
El riachuelo de 600 metros de largo fluía a través de un área de 26 construcciones de reliquias culturales, incluyendo 18 salas gremiales de varias regiones de nivel provincial de China, lo que muestra la fuerte estructura comercial de la zona hace 500 a?os.
Mucho de este patrimonio histórico permanece y en la actualidad está protegido o preservado. Algunos de estos lugares están abiertos al público, mientras que otros pueden recibir visitantes en el futuro. Gracias al último plan de jardinería de la ciudad, el riachuelo ha vuelto a rejuvenecer la zona histórica.
Los espacios verdes y los jardines de flores se alinean en las orillas del riachuelo con pasarelas de madera, puentes de piedra y pabellones tradicionales repartidos por toda la zona, que hace un a?o estaba atestada de peque?as casas en mal estado y deterioradas.
El pasado agosto se puso en marcha un proyecto para recrear el paisaje histórico de la zona, proteger los edificios históricos y mejorar las condiciones de vida de los residentes locales. El proyecto se completó en abril.
"El callejón solía ser estrecho y sinuoso, lleno de peque?as casas con malas hierbas creciendo en los tejados. Tras la renovación, apenas podía reconocer el vecindario", apunta Ding Shufeng, un residente local.
Qianmen es una zona comercial de interés, con docenas de famosos restaurantes tradicionales y tiendas de recuerdos que atraen a millones de turistas.
"Es una zona que los visitantes nacionales e internacionales no quieren perderse, pero las renovaciones han asegurado un poco de paz y tranquilidad para los residentes que viven a pocos pasos de distancia. Es ingeniosa", destaca Su Shuyang, quien compuso la presentación tallada en una piedra situada a la entrada de la zona renovada.
En 2017, el gobierno municipal de Beijing inició una campa?a de tres a?os para revitalizar casi 2.500 callejones en sus distritos centrales de Dongcheng y Xicheng. Se invitó a paisajistas para que propusieran presentaciones para cada área. Hasta el momento se han renovado un total de 761 callejones, incluyendo muchos tanto en la zona como en los alrededores de Qianmen.
"Quería que el riachuelo actuase como una cinta que une la historia, la cultura, el medio ambiente y el arte dentro de la zona", manifesta Zhu Junfu, el dise?ador.
La filosofía de dise?o de Zhu fue compartida por Wang Shiren, miembro del comité municipal de preservación de historia y cultura. Wang explica que se necesitan ideas creativas para preservar los hutongs tradicionales de la ciudad.
Como parte de los esfuerzos del gobierno central para descentralizar activamente el centro de la ciudad y ampliar las áreas verdes, se ha comenzado a eliminar las funciones no esenciales de la capital y mejorar las condiciones de vida de los residentes locales. Muchos de los mercados y las empresas se han trasladado a las afueras de la ciudad y muchas personas que habitaban viviendas decrépitas y descuidadas han sido reubicadas a nuevas áreas residenciales. Además, se abrirán más parques, zonas verdes y cauces de agua en la zona centro.
Cai Qi, alcalde de Beijing, se?aló que la ciudad va a a?adir otras 600 hectáreas de zonas verdes, incluyendo 15 nuevos parques, así como 50 peque?as zonas verdes, durante este a?o.
El gobierno municipal continuará preservando la apariencia de la antigua capital, al tiempo que proporciona más servicios públicos para sus habitantes. No será difícil a?adir imágenes y sonidos de la naturaleza a la vida de los habitantes de los "hutongs" en el bullicioso centro de la ciudad, expresó Cai.