El presidente de Bolivia, Evo Morales, exhortó hoy a "cuidar y no malgastar" el agua, ante la falta de lluvias en regiones donde los ciudadanos sufren la escasez del elemental líquido y el derretimiento de glaciares.
"No malgasten agua, cuiden el agua (...) hay que cuidar el agua hermanos, los glaciares ya no hay, solamente tenemos que depender de la lluvia, hay que cuidar, no malgasten", afirmó en conferencia de prensa en Palacio Quemado (palacio de gobierno) en La Paz.
Morales se refirió de esta manera al racionamiento en un centenar de zonas de La Paz y de otras ciudades como El Alto, Cochabamba, Potosí y Sucre, donde en los últimos días se han registrado protestas en demanda de soluciones inmediatas a la carencia del líquido.
El jefe de Estado se reunió este viernes en palacio de gobierno con mallkus (líderes indígenas) del ayllu Hampaturi para buscar un acuerdo que permita que uno de sus tres canales de agua, que abastece a esa población para riego y consumo, se desvíe hacia la ciudad de La Paz.
El objetivo es que la medida aminore en alguna medida la escasez del recurso que sufren varios barrios pace?os, producto de la sequía de represas y lagos.
El funcionario sostuvo que el calentamiento global provoca sequía de lagos y glaciares que abastecían las ciudades de agua potable en varias regiones.
Reiteró su llamado a ser respetuosos del uso del líquido y anunció además la perforación de pozos en La Paz para garantizar la dotación del recurso.
A la carencia de lluvias se suma el calentamiento global que en los últimos 50 a?os incrementó la temperatura en 0,5 grados en Bolivia, lo que ha comenzado a tener consecuencias en el derretimiento de glaciares.
Esta situación causa afectaciones en las reservas hídricas y en las actividades agrícolas, además de poner en riesgo la subsistencia en poblaciones del altiplano y de la Amazonia.
La sequía que afecta gran parte de Bolivia agudizó en las últimas semanas la escasez en seis de 10 capitales importantes, donde se presentan cortes del suministro con el fin de no secar las reservas de represas a la espera de las lluvias de la temporada.
Las ciudades de La Paz (oeste), Cochabamba (centro), Sucre (sur), Potosí (suroeste), Oruro (oeste) y Tarija (sur) enfrentan problemas en este sentido.
Esta situación a su vez ha generado dificultades en hospitales y colegios, así como la quejas de vecinos y hasta sesiones colectivas de oración.
El integrante de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN), biólogo Humberto Gómez, manifestó que el retroceso de los glaciares se acelera rápidamente debido al calentamiento global.
Ello supone una grave amenaza para las posibilidades de acceso al agua potable para consumo humano, así como la pérdida de especies de flora y fauna en varias regiones de Bolivia.
Según estudios de las organizaciones Reacción Climática y Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema), los cambios climáticos amenazan con derretir por completo los glaciares andinos que están por debajo de 5.400 metros de altitud para el 2030.
Se?alan que el calentamiento global podría tener graves consecuencias en la parte andina de Bolivia respecto al abastecimiento de agua en ciudades como La Paz y El Alto.
(Web editor: Felipe Chen, Rocío Huang)