Desde que era ni?o, el etíope Asmelash Zeferu había so?ado con convertirse en piloto, pero fue hasta décadas después, a la edad de 35 a?os, que pudo construir su propio avión.
La aeronave con una cabina de dos asientos fue fabricada a base de piezas de material como madera, metal y aluminio y ahora se encuentra en Sendafa, una peque?a localidad a unos 39 kilómetros al este de Addis Abeba, donde vive su creador.
Nacido en la región de Tigray, norte de Etiopía, Asmelash ha llamado a su avión K-570A. K porque es la letra inicial del nombre de su madre, Kiros Wolde-Michael; 570 se refiere a los días que dedicó a construir el avión y A por avión.
Asmelash hizo la primera prueba de vuelo de su propio avión en junio de este a?o, pero no tuvo éxito.
En unas semanas, planea hacer su "prueba final de vuelo" en un pastizal a un lado de su casa. El hombre asegura que hará volar el avión 10 metros sobre el piso.
Asmelash firmó un memorándum de entendimiento con la compa?ía de telecomunicaciones china ZTE, la cual prometió apoyar las actividades del inventor a través de un paquete de patrocinio.
"Reconozco con placer su creatividad y el impacto positivo que contribuye a impulsar las mentes de otros etíopes en términos de innovación de tecnologías avanzadas en el futuro", dijo el subdirector general de ZTE Etiopía, Zhang Jintao.
El memorándum muestra el compromiso de la firma a respaldar responsabilidades sociales, dice, en particular las que tienen que ver con la innovación, la tecnología y el avance académico.
"Como parte de su responsabilidad social, ZTE ha estado apoyando muchas actividades sociales y económicas en Etiopía desde el 2000, el a?o en que empezamos a operar en Etiopía", dijo.
Además de la transferencia de tecnología en el sector de telecomunicaciones, ZTE ha estado apoyando a la educación en Etiopía, sobre todo en términos de conexión de las instituciones educativas entre sí y con homólogas mundiales, indicó Zhang.
El innovador etíope está complacido de tener el patrocinio de ZTE para la prueba de vuelo final.
"Ya resolví todo... tengo un motor mejorado y todo es perfecto para hacer mi prueba final de vuelo", comentó.
El espera que el K-570A pueda convertirse en una marca que sea manufacturada para el 2031.
Asmelash dijo a Xinhua que los aterrizajes y despegues de aviones en el lugar donde creció lo inspiraron a volar.
El etíope no pudo acceder a la escuela de pilotos de Ethiopian Airlines porque su estatura era unos centímetros menor a la requerida hace 14 a?os, cuando intentó inscribirse.