El Gobierno brasile?o y la Unión Europea (UE) firmaron hoy un acuerdo para realizar proyectos de investigación científica de forma conjunta en el Océano Atlántico.
En un acto celebrado en la Academia de las Ciencias de Brasil, en Río de Janeiro, el ministro brasile?o de Ciencia, Investigación y Tecnología, Celso Pansera, aseguró que "esta cooperación permitirá aumentar la calidad y la cantidad de proyectos de investigación marina".
Según el acuerdo, Brasil y la UE realizarán proyectos relacionados con la investigación de los ecosistemas, el cambio climático, los distintos sistemas de observación marina, el acceso y el uso de datos y el desarrollo de nuevas tecnologías para atender las necesidades de la sociedad.
Los dos bloques compartirán información sobre las actividades desarrolladas de manera unilateral y discutirán cuáles son las prioridades a la hora de llevar a cabo acciones conjuntas, con el fin de identificar desafíos y metas comunes.
El documento define siete áreas prioritarias para la cooperación bilateral: la observación transatlántica y el desarrollo de sistemas de previsión, la seguridad alimentaria, la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad del océano, la tecnología de investigación marina, la concienciación social, las interacciones continentales-oceánicas y la investigación polar.
El comisario de la UE para Investigación, Innovación y Ciencia, Carlos Moedas, resaltó que el Océano Atlántico "es uno de los recursos más importantes para Brasil y para la Unión Europea" y que es necesario seguir investigando los fondos marítimos, de los que apenas se conoce el cinco por ciento del total.
Actualmente, tres de cada siete personas en el planeta depende directamente de los recursos del mar y los océanos generan unos 250 millones de empleos y contribuyen en el 65 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.
CEl acuerdo establece además potenciar los programas de intercambio de estudiantes e investigadores, especialmente por el lado de los europeos presentes en el gigante suramericano. Actualmente Brasil tiene a cerca de 400 investigadores formándose en Europa, mientras que apenas 40 europeos hacen lo propio en Brasil.