Con un mecanismo más abierto, transparente y basado en el mercado, la tasa de orientación pronto llegará a un nivel adecuado que gane el consentimiento del mercado y que fluctúe con las fuerzas del mercado.
En el largo plazo, el yuan mantendrá su fortaleza como en los últimos a?os respaldado por el enorme superávit actual y por los sanos fundamentos económicos.
A pesar de la presión a la baja, el crecimiento económico de siete por ciento en China en el primer semestre del a?o se ajustó a los objetivos del gobierno y superó al de la mayoría de las economías del mundo, lo que significa que el país seguirá siendo un magneto de la inversión extranjera.
Las caídas temporales no deben ser malinterpretadas, dado que un mecanismo orientado al mercado ofrecerá equidad, predictibilidad y confianza en el largo plazo.