(Foto: Xinhua)
Con los aplausos del presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, y los vítores de la audiencia que ondeaba la bandera, la esquiadora china de estilo libre de 18 a?os Gu Ailing Eileen, con las manos en la cabeza y una mirada de gran emoción, logró la medalla de oro de la final de freeski femenino en los Juegos Olímpicos de Invierno Beijing 2022.
Su victoria no solo llevó al equipo de China a la cima de la tabla actual de medallas olímpicas con tres medallas de oro, también es un logro histórico ya que Gu es la primera medallista de oro olímpico femenino en deportes de nieve.
"Este es el mejor momento de mi vida, momentos como este hace que todo sea tan digno", expresó Gu en una entrevista posterior y agradeció a la audiencia por su gran apoyo.
Sin embargo, Gu, quien fue elogiada en China, fue atacada por los medios de comunicación estadounidenses como una "traidora" debido a que nació en Estados Unidos. Algunos observadores han considerado que una China en ascenso es más inclusiva y de mente abierta que el actual Estados Unidos, que una vez se jactó de su diversidad como país de inmigrantes.
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"Todo el mundo la ama"
Muchos observadores han notado que, además del casi invencible equipo de tenis de mesa, China no ha lanzado una súper estrella deportiva desde Sun Yang.
El nuevo icono es Gu. En medio de la atmósfera festiva de la temporada del a?o nuevo lunar, los temas de la medalla de oro de Gu explotaron como fuegos artificiales. Incluso hubo referencias al lugar de nacimiento de su abuela y su hábito de dormir 10 horas.
La medalla de oro de Gu inspiró a los internautas chinos en Sina Weibo, en la que las discusiones sobre ella explotaron con más de 670 millones de visitas y millones de comentarios aproximadamente una hora después de su histórica victoria.
Además de haber nacido en los Estados Unidos y tener un padre estadounidense, Gu es como la mayoría de los otros adolescentes chinos de la nueva era: les encanta publicar selfies en las plataformas de redes sociales; les gusta la comida elegante, los viajes y los atuendos de moda. En el período previo a los Juegos Olímpicos de Invierno, ella fue admitida a la Universidad de Stanford con un puntaje SAT casi perfecto.
Algunos internautas la consideran como la obra maestra de la educación oriental y occidental, otros piensan que es una imagen perfecta que ni siquiera podría dise?arse en una película, mientras que otros aseguran que está tan cerca de nuestras vidas que tanto su excelencia como su imperfección parecen muy reales.
"Cada vez que la veo en la televisión, sonríe, confía y es optimista, lo que es realmente inspirador para nosotros", dijo un usuario de Weibo.
"Todos aman a Gu Ailing ... Tiene una especie de afinidad con sus compa?eros... Dijo que le encanta dormir, y que no le gusta limpiar su habitación, y este tipo de actitud sobre la imperfección resonó en nosotros", dijo un fanático de Gu, de apellido Yang.
La cosecha de medallas y aplausos se ha reflejado en el valor comercial de Gu. Según las estadísticas de los medios, en 2021, firmó con unas 30 marcas nacionales y extranjeras, y puede llegar a ganar más de 100 millones de renminbi (15.7 millones de dólares).
“El hecho de que los atletas interculturales representen a China y obtengan un amplio apoyo de la generación más joven del país refleja la mentalidad abierta del país en su conjunto”, indicó Ren Hai, analista del movimiento olímpico.
De hecho, a excepción de Gu, un gran grupo de jóvenes chinos que aparecieron en los Juegos de Verano de Tokio y los Juegos de Invierno de Beijing rompieron algunos estereotipos.
El snowboarder chino Su Yiming ganó la medalla de plata el lunes. Cuando los medios le preguntaron si pensaba que la calificación era demasiado baja, dijo: "No me importa eso".
El verano de 2021 también vio a una gran cantidad de jóvenes lindos salir a la luz pública y ser amados, como Yang Qian, un tiradora con manicura y horquilla, y Quan Hongchan, un joven buceador que ama los bocadillos.
"Son más jóvenes, más positivos y con más personalidad", recalcó Ren. Y se?aló que no son exactamente lo mismo que los atletas chinos de la vieja generación, lo que refleja la diversidad de la sociedad actual.
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Vórtice geopolítico
El 19 de julio del 2013, una chica que llegaba a los 10 a?os se inscribió en Weibo con el apodo de "princesa rana Gu Ailing", y ha publicado algunas fotos de sus competiciones de esquí.
El apodo proviene del primer casco de Gu cuando comenzó a esquiar, que era verde y tenía una corona y un alfiler de cabello rosa, según informes de los medios.
Gu salió a la vista del público por primera vez el 6 de junio de 2019, cuando anunció en Weibo que representaría al Equipo de China en los Juegos Olímpicos de Invierno Beijing 2022. En el mismo mes, Gu cambió su nacionalidad estadounidense por la nacionalidad china.
Debido a la sensibilidad en el cambio de nacionalidad y la falta de atención en los deportes de invierno, en ese momento Gu no atrajo mucho el entusiasmo del público.
En los siguientes dos a?os, ganó 12 medallas de oro para China. Cada vez más personas se familiarizan con Gu, una chica a la que le encanta comer albóndigas y pato asado de Beijing, especialmente cuando descubrieron que el “putonghua”(el chino mandarín) de Gu con acento de Beijing es "más estándar que el mío".
Y nadie en China duda de ella desde un punto de vista patriótico. Algunos hasta han notado que hay un "dragón chino" en el atuendo de Gu.
La noche antes de que Gu ganara el oro, luchó contra la cuenta de Instagram de US Media Insider, ya que los medios fabricaron que los internautas chinos estaban atacando a la patinadora artística Zhu Yi, quien eligió representar a China en lugar de Estados Unidos, pero no tuvo un buen debut.
"Como alguien que realmente usa las plataformas sociales chinas, voy a decir aquí mismo que más del 90% de los comentarios son positivos y edificantes", aclaró Gu.
Pero algunos medios de comunicación estadounidenses abandonaron su hipocresía y atacaron a Gu para defender la frágil dignidad de Estados Unidos. CNN destacó que Gu es "innegablemente estadounidense", mientras que medios como Fox dijeron que Gu era "ingrata" e incluso "vergonzosa" a cambio de dinero.
“La elección de la nacionalidad china refleja la creencia de Gu de que las condiciones en China son más propicias para su desarrollo personal y progreso”, aseguró Li Haidong, profesor del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Relaciones Exteriores de China.
“La sociedad china es lo suficientemente inclusiva como para respetar las elecciones individuales de cualquier atleta”, recordó Li. “Hay muchos atletas que hablan el dialecto del noreste de China pero no representan al equipo chino en los Juegos Olímpicos. Deseamos éxito a todos los atletas”.
“Los deportes no deben ser politizados o ideológicos, sino que deben mejorar la comprensión, promover el progreso y el potencial de los atletas”, recalcó.
"El éxito de Gu no debe atribuirse únicamente al sistema y a las condiciones de Estados Unidos", enfatizó Li. "Debemos reconocer la actual condición global del deporte y las oportunidades que China también le ha proporcionado".
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)