Planta nuclear de Tianwan, en la provincia de Jiangsu
Beijing, 11/06/2018 (El Pueblo en Línea) - Tras un acuerdo firmado entre empresas chinas y rusas, la tecnología nuclear rusa VVER-1200 de tercera generación pronto entrará en el mercado chino. El avance ruso podría ocurrir a expensas de los futuros beneficios de la empresa estadounidense Westinghouse, privándola de un contrato de cerca de 80 mil millones de renminbi (12,5 mil millones de dólares).
La Corporación Nuclear Nacional de China (CNNC) y la nuclear estatal rusa Rosatom acordaron construir un total de cuatro reactores VVER-1200 en la planta nuclear de Tianwan de la provincia Jiangsu, y en la planta nuclear Xudapu de la provincia Liaoning, como parte de unos 20 mil millones de renminbi en contratos, indicó un comunicado publicado este viernes en el portal digital de la CNNC.
La planta de Xudapu planea instalar seis reactores de un millón de kilovatios. Los medios de comunicación afirmaron este sábado que los reactores No.3 y No.4 de la planta de Xudapu usarán tecnología rusa y la construcción de los mismos podría comenzar antes de los reactores No.1 y No.2 que tendrán tecnología AP1000 de Westinghouse. Eso significa que Rosatom ha logrado conquistar un espacio en el mercado chino que antes era de Westinghouse.
"El costo de un reactor AP1000 de tercera generación de un millón de kilovatios es de alrededor de 20 mil millones de renminbi", informó Wang Dezhong, profesor especializado en tecnología nuclear de la Facultad de Ingeniería Mecánica de la Universidad Jiao Tong de Shanghai.
Esto significa que Westinghouse podría perder un acuerdo valorado en 80 mil millones de renminbi si no consigue el contrato para construir los cuatro reactores restantes.
Wang también se?aló que elegir el mismo camino tecnológico para la mayoría de los reactores de una planta nuclear ofrece muchas ventajas operativas.
Sin embargo, hay excepciones. "La planta nuclear Qinshan, de la provincia de Zhejiang, alberga reactores con distintas capacidades y rutas tecnológicas", destacó Wang.
La planta nuclear de Sanmen en Zhejiang, la primera en el mundo en disponer de tecnología AP1000, ha sido golpeada por retrasos que podrían ponerla en quiebra, advirtieron expertos.
Lin Boqiang, director del Centro Chino de Investigaciones Económicas del Sector Energético de la Universidad de Xiamen, indicó que la posible pérdida del contrato de Westinghouse no es el resultado de las tensiones comerciales entre EEUU y China, porque Westinghouse está en quiebra. La Corporación Toshiba actualmente trata de encontrarle comprador a Westinghouse.
"La energía es una parte clave de los vínculos comerciales China-Estados Unidos, pero la cooperación nuclear lleva demasiado tiempo, y la administración de Trump está ansiosa de verificar resultados rápidos ", manifestó Lin.
La aplicación de la tecnología de reactores VVER-1200 se sumará a la situación de China como terreno de prueba mundial para el uso de la tercera generación de tecnologías nucleares y alineará la tecnología rusa en competencia con la china Hualong, la estadounidense Westinghouse y la europea Orano.
De acuerdo a datos de la Administración Nacional de Energía de China, desde el primero de noviembre del 2017 hay 37 unidades de energía nuclear en funcionamiento en China continental, rendimiento que ocupa el tercer lugar a nivel mundial. China también tiene en construcción 19 unidades de energía nuclear y la capacidad instalada combinada de ambas categorías será de 57,5 millones de kilovatios.
“Si China sigue instalando la tecnología AP1000 en Xudapu sería beneficioso para Estados Unidos”, asegura Lin.
"Sin embargo, tanto el AP1000 y el [Orano] del EPR han resultado tecnologías costosas de construir, mientras que la energía nuclear china se enfrenta a una fuerte competencia proveniente de otras fuentes de energía limpia como la eólica y la solar" advirtió.
“El camino ruso también tendrá que demostrar su eficacia y eficiencia en función del costo”, se?aló Lin.
Hay tres reactores chinos que utilizan tecnología rusa y tienen un buen historial de seguridad, informó la Administración Nacional de Energía de China.
(Web editor: Rosa Liu, Rocío Huang)